Inversor Diario

Invertí sin miedo: tenés seguro

Así como el seguro que contratamos para nuestro auto es lo que nos permite estar tranquilos frente al volante, en la bolsa hay un tipo de seguro que podés contratar para cuidar e incluso incrementar tu capital.

 

Salir a la calle con el auto es, inevitablemente, exponerse a un accidente. No importa si sos un gran conductor, responsable y cauto: siempre estás expuesto a un imprevisto mecánico o a otro conductor imprudente.

Claro, si uno no manejara no correría ningún riesgo, pero tampoco podría llegar en el tiempo ni con las comodidades que uno desea.

¿Cómo lidiamos con el riesgo, entonces?

Contratamos un seguro.

Los accidentes son la excepción y no la norma, si no las compañías aseguradoras se fundirían. La confianza en las bajas chances de sufrir uno es lo que te hace manejar tranquilo, mientras que además contratás un seguro que te cubra en caso de quedar del otro lado de la estadística.

La prima que pagamos al seguro es la tranquilidad que compramos frente a un imponderable.

El mundo de las inversiones no es tan diferente. Tenemos los agoreros de siempre, que hace añares alertan la llegada de la crisis. Si fuera por ellos, el auto estaría en la cochera y el dinero en el colchón.

Dejame contarte algo sobre estas crisis por venir…

 

Nadie acierta prediciendo crisis financieras

Siempre alguien está anunciando una crisis. Muchos inversores que desconocen la variedad de instrumentos financieros disponibles en el mercado bursátil se espantan y deciden no invertir. Así se quedan fuera no solo de las ganancias posibles, sino de la protección del patrimonio que queda expuesto, por ejemplo, a la inflación rampante.

Es que invertir en bolsa es una de las principales herramientas para poder multiplicar tus ahorros sin importar su volumen.

Vayamos a lo que estamos viviendo actualmente.

Desde hace años hay analistas que predicen que se viene una gran caída de la Bolsa. Recuerdo puntualmente a unos (cuyos nombres vamos a omitir) que a comienzos de 2016 pronosticaban una inminente crisis financiera mundial. ¿Sabés cuánto subió el S&P500 desde aquel momento hasta hoy? ¡Más del 50%!

En la tabla a continuación, te presento un estudio de Bank of America Merrill Lynch, que analiza los últimos picos de mercado antes del advenimiento de una crisis. Allí se detalla el retorno en los meses previos y el porcentaje del retorno del ciclo total que se dio en esos meses:

Anticiparte demasiado a la caída del mercado te hubiera hecho perder más que lo que hubieras perdido si, efectivamente, hubieses estado adentro al momento de la caída del mercado.

Si, te convenía caerte con el mercado antes que salir temprano.

Por ejemplo, si salías 24 meses antes del pico del mercado, te hubieras perdido, en promedio un retorno del 58% en dólares (tené en cuenta que los años de mayor caída de la bolsa, el retroceso fue de 37%) y un 45% del total de la suba del ciclo.

A su vez, si acertabas un año antes de que se diera el pico de mercado, te hubieras perdido un promedio de 25% de retorno y un 19% del movimiento del ciclo. Por último, si hubieras tenido la suerte de acertar y salir 6 meses antes del pico (algo que la mayoría de estos jinetes del apocalipsis no está ni cerca de conseguirlo), hubieras perdido un 15% de retorno (el retorno anual promedio del S&P500 se ubica cerca del 9% anual) y un 11% del total del ciclo.

 

Los mercados alcistas no mueren de viejos

El mercado alcista actual, que comenzó en marzo de 2009, ya cumplió 126 meses. Es el mercado alcista más largo de la historia, y eso hace que cada vez más analistas suscriban a la teoría de que estamos próximos a una gran crisis financiera.

Pero dejame contarte algo. Los mercados alcistas no se terminan por el paso de los años. Si uno mira como terminaron otros mercados alcistas de la historia, una característica clave es la euforia de los inversores. Esta euforia lleva a valuaciones inexplicablemente altas de las compañías.

Y con tanto negativismo presente, hoy podemos decir que se trata de uno de los mercados alcistas más apáticos de la historia. Y esto es lo que deja combustible para que la suba continúe.

 

Agarrá tu paraguas y salí a pasear

Como en el caso de los autos, en las inversiones también hay seguros que podés contratar para prevenirte de accidentes. ¿Cómo? Mediante la compra de opciones financieras de venta, también denominadas put.

¿Cómo funciona esta herramienta?

Como en el caso del seguro del auto, se paga una prima. La prima en el caso de los put te da el derecho (no la obligación) de vender un determinado activo en el futuro a un precio determinado, con una fecha de vencimiento del contrato. Si el activo cae por debajo del precio fijado, ejecutamos nuestro seguro (el put) y evitamos tener mayores pérdidas.

Al igual que hay diferentes tipos de seguros y coberturas en el caso de los autos, también a la hora de elegir el precio (o strike, en la jerga financiera) del put habrá diferentes opciones.

Así, por ejemplo, un put que nos cubra de una baja de mercado del 10% será “más caro” que el que nos cubra de una baja del 30%. En ese sentido, en función a nuestra tolerancia al riesgo elegiremos el put que vamos a comprar.

¿Qué costo tiene ese seguro?

Bueno, dependerá del margen de cobertura que busques tener. Por ejemplo, supongamos que quieres mantenerte en el mercado mientras permanezca en tendencia alcista.

¿Cuándo decimos que un mercado entró en un mercado bajista? Cuando desde su máximo acumula una caída superior al 20%.

Entonces deberíamos comprar un put que nos cubra de una caída del 20% del mercado. De comprar un put así, destinaríamos (con los valores actuales) aproximadamente un 1% anual de nuestro portafolio a la compra de este seguro.

¿Te parece mucho un 1%? Pensá que los que siguieron la recomendación de estos analistas y esperan una crisis desde hace 3 años, ya se perdieron 50% de posibles ganancias. ¿Acaso no hubieran preferido haber pagado un 4% en total en estos años pero haber disfrutado de estos excelentes retornos?

Es inútil intentar predecir las crisis financieras. Es como no sacar nunca el auto de la cochera por miedo a chocar. Incluso si llegan estas crisis (que inevitablemente en algún momento lo harán), nos daremos cuenta de que quizás no sean tan graves como nos anunciaban. Y mientras tanto, con un seguro cubriendo nuestra espalda, seguimos aprovechando los retornos del mercado alcista más largo de la historia.

Saludos,

Matías Daghero

Para Inversor Global

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