Cómo leer un gráfico como un trader

Hoy te enseñaré cómo aplicar técnicas chartistas, propias de este análisis, que te ayudarán a decidir cómo y cuándo invertir, tomando como guía las acciones de Apple Inc.

Estimado lector,

Analizar gráficos de precios para un activo, con su subidas y bajadas, es clave para saber cómo y cuándo invertir. Hoy tomaremos a una de las empresas que componen al grupo FAANG para ejemplificar la importancia del análisis técnico.

FAANG es el acrónimo que hace referencia a Facebook (ahora Meta), Amazon, Apple, Netflix y Alphabet (casa matriz de Google). Su relevancia en la cultura popular y en el mercado bursátil ha llevado a muchos inversores a invertir en estas compañías desde la perspectiva del análisis fundamental.

Es decir, intentan establecer el precio teórico de una acción a través de la información económico-financiera disponible que puede afectar a la valoración de una empresa.

El análisis fundamental no predice si el precio de una acción va a subir o bajar en el corto plazo, sino que intenta establecer el valor que tendrá una acción a largo plazo.

Por otro lado, tenemos el análisis técnico, al que también se le puede llamar “chartismo”. La palabra viene de chart (“gráfico” en inglés) y consiste en la identificación de patrones en la curva del precio representados en los gráficos de la acción.

Gráfico de acciones de Apple a 5 de noviembre Fuente: Yahoo! Finance
Algunos inversores tienen la creencia errónea de que con este tipo de acciones no es posible aplicar técnicas chartistas para determinar su precio futuro.

Pero como podemos comprobar en el gráfico de Apple (AAPL), de las empresas más importantes del mundo, es fácil localizar patrones chartistas dentro de su curva de precio que nos pueden ayudar mucho a la hora de tomar decisiones de inversión.

Tendencia alcista

Una de las principales tareas del chartismo es conseguir figuras de continuación de tendencia. Estas ayudan a determinar si el precio de una acción seguirá su tendencia actual o si puede producirse un cambio.

Localizar estas figuras de por sí no es fácil: es necesario dedicarle tiempo y librarnos de las emociones típicas que afectan a los inversores.

Tomemos a Apple como ejemplo: usaremos técnicas chartistas para determinar la dirección más probable que el precio puede seguir y determinar los objetivos que podemos conseguir con esta información.

Al mirar el gráfico de Apple, podemos identificar una figura en forma de triángulo ascendente. Este triángulo cuenta con al menos cuatro puntos ascendentes, los cuales convergen con otros cuatro puntos descendentes.

Así se ve:

Fuente: ProRealTime
Se sabe que la ruptura al alza de este triángulo indica que habrá subidas de precios y que el precio objetivo será determinado por la anchura del triángulo. Aquí entran en juego los patrones.

No obstante, la ruptura al alza debe producirse entre el segundo tercio y el último tercio del triángulo. Si, al último tercio el precio no va al alza, se invalida la estrategia.

En estos gráficos de Apple, podemos ver triángulos claramente formados y siempre al alza. Además, también tenemos la teoría de Charles Henry Dow que confirma la tendencia.

Dow, precursor del análisis técnico, planteó un fenómeno llamado throwback. Esto sucede cuando el precio de una acción vuelve al anterior valor que le supuso una resistencia y desde allí toma un rumbo alcista.

En este gráfico se puede ver cómo en noviembre del 2018, Apple llega a su resistencia de USD 55. Entonces el triángulo desciende en enero del 2019 y el valor por acción cae debajo de los USD 40.

Fuente:ProRealTime
Pero la figura triangular se vuelve a dibujar hasta dos veces, en mayo del 2019 y septiembre del 2019. En ambas ocasiones vuelve al precio de resistencia (USD 55) y finalmente lo deja atrás con un tercer triángulo en febrero del 2020, cuando el valor sube a los USD 80.

Este patrón con throwback también se dio hace unos meses (puedes verlo en el mismo gráfico) y es el que ha llevado a Apple a la situación actual (USD 150 al momento de escribir esto).

Vértigo con Apple

De igual manera, hay que tener claro varios aspectos al analizar los gráficos con el punto de vista técnico: podemos hacer trades largos teniendo en cuenta la zona en donde aplicar el stop de pérdidas.

Por ejemplo, un cierre por debajo de los USD 145 invalida esta estrategia. La idea es aprovecharse de la predisposición triangular de las acciones de Apple, invertir a la baja y vender al alza.

Otro aspecto es la proyección que podemos inferir gracias a la figura técnica, es decir la zona de los USD 185 para los primeros meses del 2022. Esto es nada más y nada menos que un aumento del 20%, lo cual es bastante ambicioso.

Los más conservadores pueden poner como objetivo un precio más bajo. Si el precio supera a esta zona, pueden tomar la decisión de deshacer toda la posición o cerrar solo el 50% y dejar el resto para que llegue al objetivo final de los USD 185.

Con este ejemplo es fácil demostrar cómo una misma estrategia puede dar resultados diferentes en función de cada inversor, de sus decisiones y su aversión al riesgo.

El vértigo que produce ver el gráfico con el histórico de la cotización de Apple está más que justificado si piensas que desde el año 1998 ha subido cerca de un 143.000%, una auténtica locura.

Pero muchos de los que sintieron ese vértigo años atrás hoy en día se arrepienten de no haber hecho caso a las múltiples señales y oportunidades de compra que Apple nos lleva ofreciendo las dos últimas décadas.

La hora de los valientes ha llegado de nuevo.

Buen trading,

Alberto Chan

Para El Inversor Diario