Consejo de Kiyosaki: Conoce tu activo más poderoso en la era digital

Hay que tener en claro que estamos en la era de la información. Una época que se caracteriza por el acceso sin precedentes a enormes cantidades de datos y conocimientos a través de la tecnología digital e internet.

La facilidad con la que se puede acceder a información y recursos educativos fue transformado la forma en que aprendemos, trabajamos, nos comunicamos y reaccionamos a los cambios.

En un mundo donde la información está tan al alcance de la mano, quienes se educan financieramente tienen una ventaja competitiva significativa. Pero no se trata solo de cuánto sabes, sino de qué haces con ese conocimiento para generar riqueza y mejorar tu vida.

Por ejemplo, aunque hayas leído el newsletter de Matt sobre las mejores acciones para invertir actualmente, si no sabes cómo aplicar ese conocimiento ¿de qué te sirve?

Desde esta perspectiva, Robert Kiyosaki argumenta que la información y la educación financiera son herramientas crucialespara alcanzar el éxito económico, pero no es todo lo que hace falta para lograr nuestros objetivos.

Entrenar nuestra mente para reconocer y aprovechar oportunidades es el complemento esencial en un mundo donde la información está tan al alcance de la mano.

Entonces…

¿Cómo podemos crear nuestra propia suerte?

Como dijimos en un inicio, la era de la información nos ofrece la oportunidad de educarnos continuamente y de manera autodidacta, lo que puede ser un factor determinante para nuestra prosperidad financiera y personal.

Resulta que, en la actualidad, el verdadero poder radica precisamente en eso: la información. Robert Kiyosaki, en su libro Padre Rico, Padre Pobre , destaca la importancia crucial de la educación financiera y su aplicación práctica para alcanzar la libertad económica.

En este sentido, según Kiyosaki,la mente es el activo más poderoso que poseemos, y es fundamental entrenarla para reconocer y aprovechar oportunidades financieras.

Robert argumenta que, ya que el cerebro es un músculo, puede ser entrenado para llevarnos hacia la riqueza o, si se descuida, puede desarrollar comportamientos que perpetúen la pobreza en una familia durante generaciones.

La clave está en la educación y la práctica continua.

Es cierto que en la era de la información tenemos un acceso sin precedentes a recursos educativos que pueden transformar nuestra comprensión y manejo del dinero.

Pero la educación financiera, según Kiyosaki, no se trata simplemente de acumular conocimientos, sino de adquirir y desarrollar habilidades que nos brinden posibilidades y cierta variedad de opciones.

Esta educación nos enseña a ser creativos en la resolución de problemas económicos, a identificar oportunidades donde otros ven obstáculos, y a tomar decisiones informadas que nos acerquen a nuestros objetivos financieros.

Robert enfatiza que tanto la suerte como el dinero se crean, plantea:

“¿Por qué querrías incrementar tu educación financiera? Porque eres de la clase de personas que crea su propia suerte. Aceptas cualquier cosa que ocurra y la haces mejorar. Y es que pocas personas se dan cuenta de que la suerte es creada, al igual que el dinero”.

Entonces, el éxito no es meramente el resultado de circunstancias aleatorias o de haber nacido en una familia rica. La suerte y el dinero son el producto de la preparación, la educación y la acción deliberada.

De hecho, muchos definen a la “suerte” como ese punto en donde se encuentran la preparación y la oportunidad.

La suerte ciertamente favorece a quienes están preparados, y esa preparación viene de entrenar nuestra mente para pensar de manera crítica y estratégica sobre el dinero y las oportunidades.

Así como podemos entrenar nuestro cuerpo para estar en forma, debemos entrenar nuestra mente para ser financieramente ágiles.

¿Cómo? Bueno, esto implica:

1. Aprender a manejar nuestras emociones en torno al dinero.
2. Desarrollar habilidades de inversión.
3. Entender cómo funciona el dinero en el mundo real.

Al hacer esto, no solo mejoramos nuestra situación financiera, sino que también creamos un legado de conocimiento y habilidades que pueden beneficiar a las generaciones futuras.

En resumen, en la era de la información, el verdadero poder está en nuestra capacidad para acceder, comprender y aplicarla educación financiera.

Al entrenar nuestra mente, podemos reconocer y crear oportunidades que nos conduzcan a la riqueza, y evitar comportamientos que perpetúen la pobreza. Recuerda que para nuestro gurú el conocimiento es poder, y la aplicación creativa de ese conocimiento es la clave para alcanzar el éxito financiero.

Esto fue todo por hoy.