La evolución de la inflación en el 2019

Un repaso por los movimientos de la inflación en el 2019, según el INDEC.

Los datos del INDEC sobre la inflación, mes a mes, no parecen reflejar la realidad tal y como se vive en la calle. Esto tiene una explicación.

La inflación es un proceso económico generado por el desequilibrio que se produce entre la oferta y la demanda de productos y servicios: los precios suben mientras que los salarios se mantienen y el dinero sufre una pérdida de valor, por lo que se dificulta acceder a todo tipo de bienes.

Este fenómeno puede generarse por diversas variables, siendo las más comunes el aumento de la demanda y el encarecimiento de materias primas para la producción. En el primer caso, lo que sucede es que aumenta la solicitud de cierto producto o servicio y el sector productivo no logra suplir el pedido con rapidez.

En el caso del aumento de costes productivos, las empresas deben aumentar los precios de sus productos finales para lograr mantener la rentabilidad de sus negocios, debido a que los materiales primarios utilizados para confeccionar dichos productos también aumentan de valor.

Para poder controlar la inflación es preciso llevar un registro de la misma, en el que se pueda constatar qué elementos de primera necesidad varían en su precio y de cuánto dinero es dicha variación. En la Argentina, la medición la lleva a cabo el INDEC, el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina.

En esta medición se relevan los datos que ofrece cada mes respecto al anterior el Índice de Precios al Consumidor. En este indicador figuran los precios promedio de un número de bienes de la “canasta básica”, es decir, aquellos productos y servicios clave para la subsistencia de las personas y los núcleos familiares.

Los datos recopilados analizan y comparan los precios de alimentos y bebidas no alcohólicas, prendas de vestir y calzado, vivienda, agua, electricidad, gas, combustible, equipamiento y mantenimiento del hogar, bebidas alcohólicas y tabaco, transporte, salud, educación, recreación y cultura; así como restaurantes, hoteles y bienes varios.

En nuestro país, el tema de la inflación es históricamente un problema que afecta la economía. Se puede ver, a lo largo de los años, un continuo aumento de los precios, aunque no siempre está acompañado por un aumento salarial proporcional. Se puede hacer un breve repaso por los datos del INDEC respecto a la inflación del 2019, mes a mes:

La inflación en enero del 2019 fue del 2,91%, febrero del 3,77%, marzo 4,68%, abril 3,44%, mayo 3,06%, junio 2,72%, la inflación de julio 2019 fue del 2,20% (registrándose como la más baja del año, hasta ahora); la inflación de agosto 2019 fue del 3,95%, setiembre marcó la inflación más alta contabilizada, con un 5,89%, la de octubre fue del 3,29. Hasta aquí llegan los datos difundidos durante la presidencia de Mauricio Macri.

¿Qué significan estos datos? Son los porcentajes de aumento que se registran en comparación al mes previo. Además de esta medición de inflación mensual durante lo que va del 2019, también se contabiliza la relación anual respecto a los mismos períodos en años anteriores, o contando un año a partir de un mes específico (por ejemplo, de marzo del 2018 a marzo del 2019)

A este índice se le llama “inflación acumulada” y a esta altura del 2019, el INDEC marca un 42,2%, siendo la inflación interanual –de noviembre 2018 a noviembre 2019- de un 50,5%. Según datos del IARAF, Instituto Argentino de Análisis Fiscal, si el año cierra con una inflación mayor a la del 2018, estamos hablando del dato anual más alto de los últimos veintiocho años.

¿Qué elementos económicos y sociales son los que producen una economía con alta inflación? Por un lado, los elevados índices de pobreza, gran desempleo y recesión reiterada causada por los desincentivos provocados a la inversión productiva. En pocas palabras, sin inversión a la industria, las empresas cierran, aumenta el desempleo y por consiguiente, la cantidad de personas que no perciben al menos el salario mínimo.

Los datos arrojados por el INDEC respecto a la inflación del 2019 posicionan al país en un ranking poco agradable: nuestro país registra una inflación aún más elevada que la que suman los principales países de América combinados. Muchos de ellos, de hecho, registran bajas en sus porcentajes inflacionarios, siendo esta una tendencia de carácter mundial.

Estamos hablando de Canadá, EEUU, Méjico, República Dominicana, Puerto Rico, Honduras, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Jamaica, Colombia, Ecuador, Perú, Brasil, Bolivia, Paraguay, Chile y Uruguay. El único país que quedó por fuera del recuento fue Venezuela, por estar atravesando una hiperinflación con características muy particulares. 19 países que, en total, suman un número menor de inflación que el nuestro.

El problema de la inflación acumulada durante el 2019 en Argentina tendrá, sin dudas, sus efectos en el 2020. Se prevé, pautada por el Presupuesto, una tasa de inflación del 38%, lo que equivale a un promedio mensual del 2,7%. Teniendo en cuenta los números actuales, quedará en incertidumbre el camino que tomará el próximo gobierno para cumplir con dicha previsión.