Invertir en opciones según Robert Kiyosaki

Hoy te explico con ejemplos prácticos cómo puedes poner en práctica la estrategia de inversión con opciones financieras, que te da la posibilidad de obtener los mejores resultados en este mercado.

Estimado lector:

Hace unas semanas, hice que mi asesor en Rich Dad, Andy Tanner, se uniera a la reunión semanal de mi equipo. Durante estas reuniones, solemos discutir los acontecimientos económicos y financieros actuales como parte de nuestra educación financiera continua.

Lo que nuestro equipo aprendió de Andy podría tener un gran impacto en tu futuro como inversor.

Y te comparto los detalles a continuación.

Vender para generar ingresos, comprar para protegerte

Un miembro del equipo comentó lo siguiente en la reunión: “Si entendí bien, vendes opciones para obtener ingresos y compras opciones para protegerte”.

Me pareció una forma muy simple de explicar el razonamiento que presentaba Andy, pero como no soy un trader de opciones, le pedí que lo explicará más en detalle él mismo.

Más abajo encontrarás lo que me dijo:

Ejemplo de trading con opciones: la parábola del traje

Imagina que conoces un sistema simple para generar dinero casi de la nada, y puedes implementarlo una y otra vez cuando lo necesites.

Existe una parábola financiera para explicar cómo funciona este principio.

Un día, un hombre caminaba por su pueblo, mirando las diferentes vitrinas de las tiendas en el camino. En una tienda en particular, un hermoso traje le llamó la atención. Entonces entró en la tienda de ropa y le preguntó al empleado el precio.

“Bueno”, dijo el empleado, “este es un traje muy bonito hecho de la mejor lana. El precio regular es de USD 2.000. Afortunadamente, hoy es el último día de una oferta especial, por lo que el traje está disponible por solo USD 1.000”. El comprador reconoció esto como un muy buen precio. Pero no tenía suficiente dinero para comprar el traje en ese momento.

El hombre preguntó: “¿Hay alguna otra forma en que pueda tener este traje a este precio con descuento sin tener que pagarlo ahora?” El empleado, queriendo preservar la venta, respondió: “Hagamos un acuerdo de caballeros. Pondremos el traje en reserva para que nadie más pueda llevárselo, siempre y cuando regreses en 30 días para pagarlo en su totalidad al precio con descuento de USD 1.000”.

El hombre se sintió muy bien con el acuerdo propuesto por el vendedor. Tenía la esperanza de poder conseguir el dinero después de pagar sus gastos ese mes, pero también se sentía bien de no estar obligado a comprar el traje en caso de que no pudiera.

Así que acordó poner el traje en reserva y el empleado lo hizo con el precio en descuento de USD 1.000.

Como prueba de este arreglo, el empleado le dio al hombre una hoja de papel con el nombre de la tienda, el nombre del empleado, los términos del acuerdo de palabra y su firma.

El trading de opciones simplificado (una promesa y una elección)

El hombre podía presentar ese papel en cualquier momento dentro de los treinta días siguientes para recibir el traje al precio de oferta. El empleado, actuando en nombre de la tienda, se comprometió a vender el traje a un precio específico en un período de tiempo determinado. El hombre tuvo la opción de comprar el traje de acuerdo con esos términos. Y lo que es más importante aún, el hombre no tiene riesgo de pérdida.

A la mañana siguiente, se despertó y puso las noticias. La historia principal trataba sobre una estrella deportiva muy popular, y el atleta vestía el mismo traje que él reservó. Más tarde, el hombre pasó por la misma tienda donde compró el traje. La tienda estaba a rebosar de gente; se formaba fila solo para entrar. Todos querían el traje que llevaba el atleta, el mismo que el hombre reservó el día anterior.

Al notar esto, le preguntó a un joven en la fila: “¿Estás dispuesto a comprar el traje por el precio total de USD 2.000?” El joven respondió con una risa:

“Ojalá pudiera conseguirlo por USD 2.000. ¡El precio subió esta mañana a USD 4.000!”

De la noche a la mañana, el precio del traje se duplicó en función de la nueva demanda. El hombre se dio cuenta de que ahora había una fila de personas que estaban dispuestas a pagar hasta USD 4.000 por este mismo traje. Sin embargo, en su bolsillo tenía la nota de reserva que le garantizaba el derecho a comprar el traje por solo USD 1.000.

Aún más interesante, fue el hecho de que las personas en la fila estaban nerviosas pensando en que la tienda pudiera vender todos los trajes antes de que tuvieran la oportunidad de comprar uno. El traje del hombre estaba guardado de manera segura en la parte trasera de la tienda, donde nadie más podría comprarlo.

Consideró lo que podrían pagarle por el traje que estaba en reserva. Tenía dos formas posibles de aprovechar esta situación: podía entrar en la tienda, comprar el traje por USD 1.000 y luego vendérselo a una de las personas interesadas por USD 4.000. O bien, podría vender su boleta de reserva por USD 3.000.

Ambos escenarios resultarían en un ingreso de USD 3.000 para él. Pero el primero también requeriría que destinara USD 1.000 de su propio dinero para sacar el traje del apartado. Se dio cuenta de que vender el papelito en su bolsillo por USD 3.000 era la mejor opción para él, ya que no tenía USD 1.000 para iniciar la transacción.

Se acercó al joven en la fila nuevamente y le preguntó si estaría interesado en hacer un trato. Le explicó que le vendería su contrato de reserva por USD 3.000, lo que le daría derecho a obtener el traje por USD 1.000, además de tener una garantía de obtener el traje aunque este se agotase. El joven se dio cuenta rápidamente del valor de ese papel y acordó comprarlo. Sin gastar un centavo de su propio dinero, el hombre ganó USD 3.000 en un día.

Cómo funciona el trading de opciones

Tomando como referencia la historia anterior, imagínate si este hombre estaba buscando vender una casa, comprar acciones o comprar oro. Este es el mismo escenario del cual los inversores sacan provecho todos los días.

Aquellos sin mucha educación financiera se plantean preguntas como:

“¿Debería usar mi propio dinero para comprar esta casa y luego, con suerte, venderla por más?”

“¿Debería comprar 1.000 acciones de esta compañía y, con suerte, venderlas más tarde por más?”

A este tipo de ganancias en una inversión se les conoce como ganancias de capital. Lo que se da cuando el valor final de tu inversión es mayor al que pagaste por dicha inversión. Es el aumento de tu capital invertido. Y es el enfoque que gira en torno a “se necesita dinero para ganar dinero”.

La mayoría de la gente cree que los inversores solo encuentran una inversión con potencial, sacan dinero de sus cuentas bancarias para pagarla y luego esperan que esta suba de valor para poder ganar más dinero del que invirtieron inicialmente.

Pero recuerda: el hombre de la historia nunca compró el traje. Todo lo que hizo fue firmar un acuerdo con otra persona. Y este acuerdo no le costó dinero. El empleado de la tienda se lo ofreció. En lugar de requerir dinero, todo lo que necesitó fue una simple negociación.

El acuerdo de reserva le dio al hombre la flexibilidad de decidir si el traje era lo suficientemente valioso como para tomar medidas. No requirió ningún dinero de parte del hombre, ni de su cuenta ni de un préstamo.

El trading de opciones funciona de la misma manera. No es necesario comprar una acción cuando inviertes con opciones. Por el contrario, esto te permite llegar a un acuerdo con alguien que te da la opción de comprar las acciones a un precio específico en una fecha específica en el futuro.

No es fácil, por supuesto, saber siempre cuál será el precio de un activo el próximo mes o el próximo año, pero puede ser muy emocionante para ti descubrir que en la vida real hay ofertas que puedes aprovechar y que no requieren que termines comprando nada.

¡Actúa con inteligencia!

Robert Kiyosaki

Para El Inversor Diario