De chips a criptomonedas: ¿qué nos dejó el 2021?

Nuevas variantes de Covid-19, escasez de semiconductores y máximos históricos para las criptomonedas. 2021 fue un año que dejó grandes sorpresas y nuevos escenarios. Revisemos algunas de estas tendencias, para ver hacia dónde vamos.

Estimado lector,

2021 está en el espejo retrovisor, ¡y qué año fue!

A pesar de que las vacunas se lanzaron a principios de año, el COVID-19 demostró ser más duradero de lo que muchos esperaban. Tras un fuerte descenso a principios del año, parecía que el final de la pandemia estaba a la vista.

Entonces llegó la variante Delta. Eso, y la rápida disminución de la protección de la vacuna, hicieron que viéramos un resurgimiento a mitad de año.

Ahora, nos enfrentamos a la nueva variante Ómicron. Afortunadamente, la información disponible sugiere que esta variante, aunque es más transmisible, es mucho menos mortal. Si ese es el caso, esta podría ser la variante de COVID-19 que todos hemos estado esperando… La que muta a una forma más suave, como suelen hacer los brotes virales.

Si es así, acabaremos con algo parecido, en gravedad, al resfriado común que circula indefinidamente. No es ni mucho menos una situación ideal; pero es, sin duda, mejor que la que tuvimos con las primeras cepas más mortíferas.

El año también fue una lección de economía del mundo real. ¿Qué ocurre cuando la fuerza imparable de un enorme estímulo monetario y fiscal sin precedentes choca con el objeto inamovible de la escasez de oferta? La respuesta: inflación.

Cuando el aumento de la inflación empezó a dar un mordisco al presupuesto de todos a principios de año, muchos presagiaron tiempos oscuros para las acciones tecnológicas. En algunos casos, hemos visto que los valores tecnológicos han tenido un rendimiento inferior al del mercado; tal fue el caso de los ETFs ARK de Cathie Wood, que antes eran de alto vuelo, pero aún no eran rentables.

Pero en muchos otros casos, hemos visto que los valores tecnológicos se dispararon.

Esto ha sido especialmente cierto en el caso de muchos nombres de semiconductores. La escasez de oferta de semiconductores hace que los beneficios aumenten para las empresas que los producen. Este entorno llevó al índice de semiconductores PHLX Semiconductor (SOX) a máximos históricos en 2021, con ganancias de alrededor del 37% en el año.

Y lo que es mejor: los pronósticos de una fuerte demanda a futuro, incluso después de la crisis, seguirá impulsando las ganancias de las empresas de semiconductores en 2022. La Asociación de la Industria de Semiconductores espera que su mercado crezca casi un 9% en 2022, para alcanzar un récord de más de USD 600.000 millones.

Las empresas responsables del diseño y desarrollo de microchips son las que participan en las tendencias tecnológicas más potentes de cara al 2022. Tienen la mejor oportunidad de crecer durante lo que resultará ser una de las décadas más disruptivas de la historia.

Y eso no es todo: también vivimos un momento histórico en materia de criptomonedas.

Aunque la mayoría siguen estando muy por encima de sus mínimos de 2021, algunas criptomonedas siguen luchando por superar sus máximos históricos que alcanzaron el año pasado.

En concreto: Bitcoin alcanzó nuevos máximos en noviembre, pero desde entonces ha ido perdiendo fuerza. Y aunque a Ethereum le fue mejor que a su hermano mayor, también le costó hacer un movimiento sustancial al alza.

Sin embargo, últimamente estamos viendo algunas nuevas señales de vida…

Tanto Bitcoin como Ethereum registraron sólidas ganancias estas últimas semanas y están formando niveles de soporte cruciales para futuros movimientos alcistas.

El impulso bajista de Bitcoin comenzó a detenerse después de que los inversores se mantuvieran así durante varias semanas. Esta es una buena señal, ya que la primera cripto se consolidó por encima de su nivel de soporte inicial de USD 44.000.

Para los últimos días del 2021, Bitcoin subió hasta los USD 49.200 después de registrar un movimiento al alza del 4%. Esta subida ayudó a formar un buen nivel de soporte en torno a los USD 46.000, que mantiene ahora.

A futuro, Bitcoin empieza a enfrentarse a una resistencia cerca de los USD 49.500, por encima de la cual podríamos verle hacer otro movimiento hacia los USD 50.000.

A finales de diciembre, mientras tanto, Ethereum se encontraba un poco por encima de los USD 4.000. Sin embargo, se enfrentó a una resistencia entre los USD 4.030 y USD 4.050.

Si vamos a ver a Ethereum hacer un movimiento sustancial al alza, necesitaremos que supere ese nivel de USD 4.050. Después de eso, la siguiente barrera clave que tendríamos que ver es la de los USD 4.150, por encima de la cual los defensores de Ethereum podrían impulsar el precio hasta los USD 4.250.

Por último, una mención honorífica: la moneda alternativa LUNA ha tenido gran éxito recientemente y acaba de entrar en la lista de las 10 principales criptomonedas, con una capitalización de mercado de casi USD 33.000 millones.

Tras tocar su nivel de soporte de USD 50, LUNA se disparó y actualmente se encuentra por encima de los USD 91.

Sin duda, estamos teniendo mucho movimiento en relación a las criptomonedas en la actualidad y me aseguraré de estar atento a cualquier historia que se desarrolle.

Y lo mismo con otras tecnologías en el contexto actual de escasez.

Hay muchas noticias para seguir de cerca este 2022. Mi trabajo es que estés al día con cada una de ellas.

Por un futuro brillante,

Ray Blanco

Para El Inversor Diario