Inversor Diario

Lo simple va con todo (incluso con las acciones)

Para tener éxito invirtiendo en acciones, es indispensable detectar los negocios correctos y no complicarse la vida. Con estos tres simples pasos, podrás invertir con mayor seguridad y convicción.

Al ser humano le encanta complicarse la vida.

Busca problemas donde no los hay.

Cuando aparece algo importante de verdad, lo evita o escapa.

Es algo que sucede todo el tiempo, es inconsciente.

Reflexiona un minuto y verás que es así.

La mayoría de los inversores actúan de la misma manera.

No importa la estrategia, el perfil de riesgo ni el tipo de activos que opere.

Siempre intentarán hacerlo difícil.

Incluso… esto llega a suceder en casos extremos.

Fuente: Forum-gold.fr

El mundo de las inversiones es más sencillo de lo que se cree.

Y aunque siempre hay un riesgo que asumir, puedo garantizarte que al final siempre gana lo simple.

Detrás de una acción hay un negocio

Antes de empezar, dejemos algunas cosas en claro.

Las acciones constituyen una parte proporcional del capital de una compañía.

Cuando compramos una acción, nos convertimos en accionistas de ese negocio.

Si a ese negocio le va bien, lo más probable es que a nosotros también nos vaya bien.

Si el negocio va mal, perderemos dinero.

Entonces, el primer filtro es conocer en qué negocio queremos invertir para tener mayores probabilidades de ganar dinero.

Nunca compres acciones sin saber qué hay detrás, porque esto no es una casa de apuestas.

Una forma sencilla de llevarlo a la práctica es cumpliendo tres simples pasos:

1- Busca un negocio de calidad.
2- Determina si puede enriquecerte.
3- Paga un precio justo.

 

Esto es todo, no te hace falta más nada.

Ahora voy a explicarte uno por uno.

1) Busca un negocio de calidad

Imagina que dos amigos te piden dinero prestado.

Solo puedes ayudar a uno.

Sabes que el amigo “A” le debe dinero a medio vecindario.

El amigo “B” nunca le ha fallado a nadie.

¿A quién le prestas el dinero?

La respuesta es sencilla… al amigo “B”.

Lo mismo sucede cuando decides en qué compañía colocar tu dinero.

Siempre busca compañías de calidad, con experiencia y trayectoria en la industria.

Si tienes marcas icónicas, reconocidas y líderes en la industria, mucho mejor.

Este tipo de negocios suelen ser más resilientes al ciclo económico.

Busca compañías con ventajas competitivas duraderas y presta mucha atención si el negocio genera dinero a través de ingresos recurrentes.

Por último, asegúrate de que sea un negocio rentable, con altos márgenes y un balance financiero equilibrado.

2) Determina si te enriquece

¿Para qué invertir en una compañía que no te trata bien como accionista?

Antes de invertir en un negocio, sea cual sea su calidad, asegúrate de que los directivos sean solidarios con sus accionistas.

Existen innumerables compañías que solo intentan enriquecer a sus directivos.

¡Nunca debes estar ahí!

Investiga quiénes son los dueños, cómo está compuesto el cuerpo directivo y qué tan honestos y transparentes son.

Muchas veces dicen A y hacen B.

Descarta a esos CEO´s que solo quieren atraer a inversores incautos.

Tienes que darle mucha importancia a la visión de largo plazo de una compañía y qué pretende aportar de bueno a la comunidad.

Si la gerencia se plantea objetivos, trata de investigar si los cumplen o no.

Y, lo más importante, siempre deben devolver parte del efectivo que generan al accionista.

Pueden hacerlo recomprando acciones propias, distribuyendo dividendos, cancelando deuda o haciendo adquisiciones estratégicas.

Si no ves nada de esto, lo más probable es que el accionista no sea una prioridad.

¡Aléjate!

3) Paga un precio justo

Has hecho gran parte del trabajo.

Ahora queda la parte más engorrosa: saber cuánto debo pagar por la compañía.

De antemano sabemos que un buen negocio no va a costarnos muy barato, salvo cuando los inversores se ponen nerviosos en una crisis económica.

Siempre debes aprovechar los momentos de pánico.

La mayoría de los inversores no pueden dominar sus emociones, temen perder su dinero y suelen vender activos de alta calidad a cualquier precio cuando los precios se desploman.

¡Es ahí donde debes aprovechar la oportunidad!

Hay muchas formas de saber qué tan cara (o barata) está una compañía.

En la Membresía Acciones explicamos distintos métodos de valoración de empresas, para conocer el valor intrínseco de cualquier compañía y si se ofrece con descuento (o no).

Si quieres profundizar más sobre cómo detectar negocios de calidad, que generan valor al accionista y cómo valorarlos, te invito a sumarte a la Membresía Acciones de Inversor Global.

Ya son más de 700 los alumnos que accedieron a los cursos de Introducción al Value Investing, Psicología del Inversor y las diferentes Masterclass sobre temas prácticos.

Puedes unirte ya mismo haciendo clic aquí.

¡Te esperamos!

 

Diego Matianich
Editor de la Membresía Acciones
Para El Inversor Diario

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