¿Estás listo para invertir en el futuro? Descubre cómo los “Próximos Siete Magníficos”, impulsados por la IA, podrían eclipsar a los gigantes tecnológicos de hoy y generar rendimientos asombrosos. Prepárate para un emocionante viaje a la vanguardia de la inversión.
A estas alturas, prácticamente todos los inversores han oído hablar de los “Siete Magníficos”.
Pero si no es tu caso, te cuento: se trata de un grupo de siete grandes acciones tecnológicas: Alphabet (Nasdaq: GOOG), Amazon (Nasdaq: AMZN), Apple (Nasdaq: AAPL), Meta Platforms (Nasdaq: META), Microsoft (Nasdaq: MSFT), Nvidia (Nasdaq: NVDA) y Tesla (Nasdaq: TSLA), que han cambiado el mundo, han dominado sus industrias y, en los últimos años, han mostrado algunos de los rendimientos más altos de cualquier empresa que cotiza en bolsa.
Como grupo, han subido un asombroso 16.000% en los últimos 20 años.
Es razonable pensar que también tendrán buenos rendimientos en el futuro.
Pero ciertamente no apostaría a que en los próximos años dupliquen lo que han mostrado hasta ahora.
¿Por qué? Porque sería imposible. Simplemente son demasiado grandes.
Tomemos a Apple, por ejemplo. Tiene una capitalización de mercado actual de poco menos de USD 3 billones.
Para que se triplique desde aquí, necesitaría tener una capitalización de USD 9 billones.
Se trata de un desafío enorme, dado que en la historia del mundo nunca ha habido una empresa con una capitalización de mercado que siquiera llegue a los USD 4 billones.
Entonces, los próximos Siete Magníficos probablemente serán un grupo de acciones tecnológicas que ya son dominantes en ciertos mercados pero que por ahora aún son mucho más pequeñas que las siete que te nombré arrriba.
También es probable que estén fuertemente involucradas en la inteligencia artificial (IA).
Y aquí te explico por qué…
Antes de la revolución científica, descubrimientos como el fuego, las herramientas de piedra, la agricultura, la navegación y otros, se sucedían con tan poca frecuencia que parecía que el mundo esencialmente nunca mejoraba.
Sin embargo, en los últimos 200 años, un período que la historiadora económica Deirdre McCloskey llama “El Gran Enriquecimiento”, el conocimiento ha explotado, lo que ha llevado a un nivel de vida que era inconcebible durante la mayor parte de la historia humana.
Y este progreso, como la expansión del universo mismo, se está acelerando.
En un futuro no muy lejano, tendremos transporte, comunicaciones, tratamientos médicos, atención médica, bienes y servicios, y oportunidades de inversión que hoy no se pueden entender de verdad.
Revisemos esta cita del físico británico David Deutsch en “El comienzo del infinito”:
“Todo lo que no está prohibido por las leyes de la naturaleza es alcanzable, dado el conocimiento adecuado”. |
Piensa por un momento en esta frase.
Cada posible avance que podría beneficiarte a ti y al resto de la humanidad es:
a) | imposible, porque está prohibido por las leyes de la física o, |
b) | alcanzable en función del conocimiento adecuado. |
Y “el conocimiento adecuado” está aumentando a un ritmo sin precedentes.
Hace 40 años, no tenías una computadora personal. Hace 30 años, no tenías una conexión a Internet. Hace 20 años, no tenías un teléfono inteligente.
Y hace quince años, no tenías autos eléctricos, tecnología de reconocimiento de voz, computación en la nube, impresión 3D, realidad aumentada, 5G o Internet de las cosas.
Pronto, todos estos avances serán superados por el mayor logro tecnológico de nuestra era, uno que enviará el progreso humano a toda velocidad: la inteligencia artificial.
Las oportunidades de inversión aquí son inmensas…
El mundo hoy en día crea 2,5 quintillones de bytes de datos cada día. Y la IA es la única forma de procesar y utilizar efectivamente toda esta información.
Permite que las computadoras, los robots y otros dispositivos conectados imiten la percepción, el aprendizaje, la resolución de problemas y la toma de decisiones de la mente humana.
Esto permite que las máquinas lleven a cabo tareas específicas con una precisión cada vez mayor y sin intervención humana.
Las aplicaciones ahora se utilizan para el reconocimiento de voz, el procesamiento del lenguaje, la prevención de virus y correo no deseado, la tecnología necesaria para los pilotos automáticos, el reconocimiento de imágenes, las recomendaciones en tiempo real e incluso el trading automatizado de acciones.
Cualquier cosa que pueda lograrse mediante la inteligencia humana puede acelerarse y mejorarse mediante la IA.
Las personas tendrán mejores resultados en prácticamente todos los dominios de la actividad humana: incluyendo la comprensión, la creatividad, la resolución de conflictos, la salud y la longevidad.
Muy pronto, cada niño tendrá un tutor de IA. Cada trabajador tendrá un mentor de IA. Cada científico e ingeniero tendrá un investigador de IA. Cada médico tendrá un colaborador de IA. Cada empresario tendrá un consultor de IA.
En resumen, todos tendrán un compañero infinitamente paciente, infinitamente conocedor, infinitamente útil, que nunca duerme, se enferma, toma vacaciones o incluso va al baño, disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana.
Esto significa que la productividad, el hacer más con menos, se acelerará dramáticamente, impulsando el crecimiento económico, avanzando en nuevas ideas, nuevos trabajos y hasta industrias completamente nuevas.
La IA aumentará la inteligencia humana para resolver problemas mejor y más rápido que nunca.
En la investigación biomédica, la IA mejorará drásticamente los resultados de las investigaciones actuales.
Actualmente se necesitan aproximadamente 10 años y más de USD 2.500 millones para que un nuevo medicamento pase de la concepción a la aprobación de la FDA, el organismo encargado de autorizar estos procesos en Estados Unidos.
(Aclaro esto por si te preguntabas por qué los precios de los medicamentos son tan altos…)
Pero la IA acortará drásticamente el costo y el tiempo.
Nos permitirá obtener datos de mayor calidad a partir de menos ensayos clínicos y en menos tiempo.
En lugar de requerir decenas de miles de participantes como lo hacen muchos ensayos hoy en día, utilizará un enfoque más centrado, ayudándonos a crear terapias nuevas y seguras y llevarlas a la práctica médica antes, salvando millones de vidas.
Los primeros inversores pueden ganar una fortuna.
Así que sigue leyéndonos porque estoy 100% metido en investigar estas oportunidades.
Alex Green es uno de los asesores financieros e inversores más reconocidos en Wall Street. Por 16 años fue una figura clave en algunas de las instituciones financieras más importantes de Nueva York. A los 43 años se retiró para dedicarse a su verdadera pasión: transmitir sus conocimientos y estrategias a lectores de todo el mundo. Es editor de MicroCap Trader en Inversor Global.
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