Hoy seguiremos abordando la serie de mitos que te hacen más pobre sin darte cuenta, identificados por mi padre rico. En esta oportunidad hablaremos sobre la trampa laboral.
Por Robert Kiyosaki
Querido lector,
Vayamos directo al grano…
El martes pasado, hablamos de los engaños y mitos con los que nos topamos a diario, estemos conscientes de ello o no.
Algunos de estos engaños son realmente difíciles de detectar, incluso imposibles de reconocer para algunas personas.
De mi padre rico, aprendí a cultivar mi inteligencia financiera.Él me enseñó a detectar estafas, y a evitar ser engañado. Sin inteligencia financiera, puede ser muy fácil dejarse caer en principios falsos, especialmente los que son utilizados por los ricos para que los pobres sigan en su lugar.
Para derribarlos, por lo general necesitas que alguien más te advierta que estás siendo engañado, que te diga que estas siendo estafado y qué puedes hacer al respecto.
El martes, te expliqué cómo el sistema educativo universitario te ha estado estafando toda tu vida y se presenta como el Mito #1 identificado por mi padre rico.
Hoy, vas a descubrir por qué “conseguir un trabajo” es un mito aún mayor.
“Necesitas un trabajo”
Cuando era joven, mi padre pobre siempre me decía que tenía que ir a la escuela para poder conseguir un buen trabajo. Para mi padre pobre, conseguir un buen trabajo era lo más importante en la vida.
Él trabajó muy duro. Y siempre le preocupaba el dinero. Sin embargo, nunca pudo salir adelante. Su empleo fue una de las cosas que realmente le impidió tener éxito. Se esforzó por trabajar para otros, a menudo obtenía aumentos solo para vivir el día a día y pagaba un alto porcentaje de impuestos al gobierno.
Mi padre rico, por otro lado, nunca tuvo un trabajo “real”, y de igual manera, fue rico y exitoso.
Mi padre rico entendió que la necesidad de “conseguir un trabajo” es un mito.
En lugar de conseguir un trabajo, creó trabajos. En lugar de trabajar para otra persona, él trabajó para sí mismo. En lugar de pagar impuestos altos, usó el código impositivo para enriquecerse.
Cómo funciona esta trampa
Esta es una estafa masiva porque te hace cada vez más pobre, especialmente si tienes un trabajo bien remunerado, porque pagas más en impuestos.
¿Y adivina quién no paga impuestos altos?
El propietario del negocio para el que trabajas. Este engaño es aún peor cuando lo analizas a largo plazo. Si te va bien en su trabajo y escalas posiciones, ¿cuál es tu recompensa? Un pequeño aumento del salario y un mayor aumento en los impuestos.
Las cosas son aún peor si trabajas por tu cuenta. Pagas los impuestos más altos que existen en forma de impuestos por trabajar de manera autónoma.
La única forma de evitar esto es ser el propietario de una gran empresa o ser un inversor, para que tu dinero trabaje ti.
Así es cómo los ricos trabajan y viven.
El sistema está diseñado para beneficiar a los ricos, con el propósito de que puedan conservar su dinero mientras se aseguran de que TÚ sigas pagando impuestos.
La estafa de los impuestos
Cuando te das cuenta de que los impuestos son una manera de mantenerte pobre, entiendes que esta mentira es realmente una extensión del primer mito identificado por mi padre rico“Ir a la universidad es la única opción”.
En la escuela, aprendes a ser un buen empleado, te enseñan que si trabajas duro puedes tener éxito. Pero en realidad, no puedes, no en esos términos.
El gobierno otorga beneficios fiscales a las personas que identifica como generadores de empleo: empresarios y dueños de grandes negocios.
Quieren que el sector privado desarrolle bienes raíces, cree empresas y genere riqueza. El gobierno premia a los ciudadanos así. A cambio, este espera que los empleados paguen impuestos que cubren aspectos como el seguro médico y social.
Al gobierno le encantan las bajas tasas de desempleo por una gran cantidad de razones, y “hacer que el país trabaje” le ayuda mucho más de lo que ayuda al trabajador.
Algunas personas sostienen que los empleadores pagan estos impuestos también, pero en realidad, lo que están haciendo es usar dinero que de otra manera emplearían para pagar su parte de los impuestos.
Falsa seguridad
La idea de que un trabajo es fundamental para tu seguridad personal también es parte importante de todo este engaño.
La realidad es que tener un trabajo no te da seguridad. Retrocede un poco en el tiempo y piensa en la vida hace una década: el desempleo rondaba el 10% (en Estados Unidos), las personas eran despedidas en todo el país y vivían en lo que ahora llamamos la Gran Recesión.
En una economía donde las personas están perdiendo sus empleos, la posición más segura es poseer, o al menos tener una participación en, la compañía que despide a las personas. Y si la historia nos dice algo, siempre estamos a tan solo días de una próxima crisis. Todos pueden ser despedidos. Excepto los individuos que son dueños de las empresas que despiden a los empleados.
Aléjate de la corriente
Mi padre pobre, al igual que la mayoría de las personas, fue condicionado y educado desde el día en que nació para ser empleado.
Mi padre rico se alejó de ese pensamiento y fue un empresario. Puso su dinero a trabajar. Estaba del lado de los ricos, el lado protegido por el gobierno.
Pero, ¿cómo llegar allí?
La primera respuesta es simple: cultivando tu educación financiera y comenzando a pensar como un empresario en lugar de un empleado.
Cuando haces eso, dejas “la carrera de ratas”. Te das cuenta de que todo lo que te han enseñado sobre cómo obtener un trabajo y encontrar el éxito de esa forma es una mentira, entiendes que existe otra manera, y es una que realmente funciona y también te da una vida mejor.
Y ese es el secreto que los ricos no quieren que sepas.
Saludos.
Robert Kiyosaki
Autor del best-seller Padre Rico, Padre Pobre, y una quincena de otros libros, es uno de los mayores gurús de las finanzas personales del mundo. Gracias a una alianza con Rich Dad Latino, en Inversor Global nos enorgullecemos de presentar Plan de Retiro Soñado, el único servicio donde Robert revela acciones puntuales para comprar y vender, y Súper Acciones Millonarias y Cash Flow semanal.