Hace una década y media, la banda inglesa The Killers lanzó uno de sus himnos, llamado “Mr. Brightside”. Un tema de rock pop con sonidos característicos de aquella época. Hoy sigue siendo un tema súper escuchado en radios y que la banda sigue cantando épicamente en sus conciertos.
El punto es que la canción trata sobre un chico optimista que mira por default el lado bueno de las cosas (por eso Brightside, ‘lado soleado’ o ‘lado brillante’) y que luego se encuentra en situaciones seudoparanóicas, porque sabe que la realidad va por otro lado. La chica que pensó que podía cambiar inconscientemente sabe que está fuera de sus manos, y eso le produce una incomodidad que no puede manejar.
Claramente, voy a vincular esto con lo acontecido en la semana porque me encanta la economía, me encanta la música, y, además, me encanta encontrar falencias de este tipo.
Esta va para los Mr. Brightside del contexto local.
Empecemos…
La inflación, de facto, no bajó
Días atrás se dio a conocer el último dato de inflación, correspondiente al mes de junio y que reveló un aumento del 2,7% en la comparación mensual. A priori, sería el registro más bajo desde diciembre de 2018. Como consecuencia, la inflación interanual alcanzó el 55,8% (junio de 2019 contra junio de 2018), lo que implica que, en términos acumulados, los precios aumentaron un 22,4% desde que arrancó el año. Una cifra nefasta.
La “buena” noticia es que, a diferencia de meses anteriores, el rubro Alimentos y Bebidas no estuvo entre los que lideraron las subas. De hecho, aumentó 2,6%, por debajo del IPC. Claramente dicho rubro es el más sensible para los sectores más vulnerables, cuyos ingresos son destinados casi totalmente a la adquisición de alimentos.
El asunto es que, como dejé entrever más arriba, este registro del 2,7% fue, de facto, el más bajo desde diciembre de 2018, y los optimistas ya adelantan que el proceso de “desinflación” habría comenzado.
Bueno… yo no lo veo tan así. Te paso a explicar por qué:
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- Es un registro que tiene lugar en un contexto donde los aumentos de naftas fueron “pateados hacia adelante” con fines electorales. Concretamente, el gobierno dilató el aumento de un gravamen sobre los combustibles hasta pasadas las elecciones.
- Lo mismo ocurre con las tarifas de servicios públicos, cuyos aumentos fueron también “pateados hacia adelante” con fines electorales.
Hay que ganar como sea… - Por último, durante el mes de junio el tipo de cambio estuvo planchado gracias a las elevadísimas tasas que mantiene el BCRA, la suba de encajes ejecutada durante los últimos meses y la venta de dólar futuro. O sea, también tenemos al dólar en “precios cuidados”. Es tan obvio que hasta los más oficialistas ya advierten sobre las posibles consecuencias de esto. Consecuentemente, resulta evidente que los precios de hoy están artificialmente atrasados gracias a esta “olla presión” que está llevando a cabo el gobierno, y que tiene por objetivo triunfar en las urnas a cualquier costo.
En ese contexto, si hubiéramos tenido precios libres, no tengo dudas de que la inflación hubiera superado tranquilamente el 3%, por la ponderación de los ítems 1 y 2, más el efecto dominó de tipo de cambio (efecto que, incluso, hubiera amplificado esos mismos ítems 1 y 2).
Con este registro “contrafáctico” de un IPC teórico que estaría algo por encima del 3%, lo cierto es que no podríamos decir que la inflación se desacelera de manera clara. El registro de mayo fue del 3,1%. Si bien es verdad que la inflación estaría lejos de aquel 4 o 5% que tuvimos meses atrás, lo cierto es que en un contexto menos reprimido dudo de que hubiéramos sido capaces de perforar ese umbral del 3%.
Así queda claro, esos comentarios optimistas por parte de Sandleris y los “Mr. Brightside” de mercado están apoyados sobre un contexto artificial, y, por ende, no sostenible, dado que numerosos precios estratégicos están incluidos en la canasta de “precios cuidados” de facto.
La sumatoria de todo eso redunda en que dicha postura “optimista” resulta altamente falaz.
La inflación todavía no se está desacelerando de manera significativa. Solo están trasladando parte de la inflación de hoy para mañana.
Populismo de manual.
Algo absolutamente normal a esta altura en Peronia.
Hasta la semana próxima,
Juan I. Fernández