Uno de los principales instrumentos de trading que empleo en mi propio servicio de inversión son los ETF. Y aunque a primeras puedan generar dudas, son un excelente vehículo de inversión tanto para expertos como para inversores novatos. Y hoy te cuento cómo sacar el mayor provecho de ellos.
Recuerda que ahora puedes escuchar esta columna en Spotify en Inversor Global Podcast.
El desarrollo del mercado de ETFs (siglas en inglés de “exchange traded funds”, o “fondos cotizados” en español) ha cambiado el panorama de las inversiones.
Los inversores y traders ahora tienen un vehículo de inversión flexible que les permite comprar y vender como una acción individual, pero con las posibilidades de diversificación de un fondo mutuo.
Y esto aplica tanto para el largo plazo, como para el trading explosivo de corto plazo como el que empleo en Proyecto 100%, mi servicio de trading aquí en Inversor Global.
Los fondos cotizados en bolsa pueden emular el rendimiento de un índice bursátil conocido, como el Dow Jones Industrial Average (con el ETF DIA), el S&P 500 (con el ETF SPY) o el Nasdaq (con el ETF QQQ), y tienen ventaja de que cotizan como una acción regular.
Sus desempeños siguen de cerca los rendimientos de varios segmentos de la Bolsa, y no implican las altas tasas de gestión de un fondo regular.
Los ETFs se pueden tradear y cotizar como una acción, y cada acción representa un porcentaje del índice o vehículo de inversión. La diversificación y el menor riesgo que conllevan las acciones individuales son beneficios importantes de estos instrumentos, especialmente en momentos de extrema volatilidad en el mercado.
Para los traders más activos, no es necesario esperar hasta el final del día para vender acciones y retirar ganancias, algo que sí ocurre con los fondos mutuos. Además, puedes operar ETFs siempre que el mercado esté abierto (en Wall Street, eso es de 9:30 am a 4:00 pm ET).
Eliminar la necesidad de vender solo al final del día es un avance significativo para los inversores individuales y nivela el campo de juego para todos los participantes de la Bolsa.
Existen ETFs para numerosos sectores del mercado y nichos de inversión. Casi todos los segmentos financieros están representados por un ETF, desde la biotecnología, hasta el mercado del zinc, por ejemplo.
Los componentes individuales (es decir, las acciones que conforman los ETFs) están pensados para seguir el rendimiento de una industria, instrumento financiero, segmento o recurso natural. Esta revolución en la diversificación ha brindado a todos los inversores acceso a oportunidades previamente inaccesibles, como la Bolsa china o tecnologías emergentes.
La Bolsa de Estados Unidos se divide en diez sectores principales dentro del S&P 500. El dinero fluye hacia y desde estos sectores a medida que cambian las condiciones de inversión y los fundamentos.
Recuerda: el dinero no se gana ni se pierde. Simplemente fluye hacia los sectores más “movidos” para generar altos rendimientos. Esto es importante, porque significa que los ETFs brindan a cualquier inversor la misma oportunidad de identificar e invertir en áreas específicas en crecimiento.
Otra gran ventaja de estos instrumentos es la capacidad de operar en cualquier mercado, ya sea alcista o bajista. Habrá períodos en los que los precios oscilan al alza y a la baja. Si apuestas en contra de algún instrumento, podrás sacar provecho del movimiento en los precios. Y los ETF te permiten invertir sin importar la dirección del mercado; solo necesitas la estrategia adecuada.
En resumen, estos fondos abren la puerta a un mundo de posibilidades para los inversores. Diversificación, flexibilidad y la ausencia de honorarios para los gestores hacen de los ETFs una parte esencial de cualquier jugada, ya sea en el corto o largo plazo. Si te interesa algún sector, los fondos cotizados son un camino ideal hacia las ganancias que tiene para ofrecer.
Y la mejor parte: con las opciones financieras, puedes multiplicar el potencial de los ETFs.
Opciones, fondos cotizados y ganancias de corto plazo
Ya que este tipo de fondos aglutinan varias acciones, a veces índices enteros, muchas veces sus alzas y bajas pueden ser limitadas. Y ahí es donde las opciones financieras entran en acción.
Como te comenté la semana pasada, las opciones son instrumentos que te permiten comprar varias acciones al mismo tiempo (100, por lo general). Ya que las opciones concentran el potencial de varias acciones el mismo tiempo, cualquier fluctuación causa alzas o bajas más sustanciales en los precios.
En otras palabras, “potencian” los movimientos de una jugada.
En Proyecto 100%, mi servicio de trading aquí en Inversor Global, muchas veces recomiendo comprar opciones de acciones de ETFs amplios. Así, si las acciones de estos fondos escalan levemente, las ganancias de las opciones serán sustanciales.
Claro que esto también conlleva un riesgo; así como se potencia cualquier suba, las bajas también se hacen sentir más.
Por es importante recordar que, sin importar de qué instrumento estemos hablando -acciones de ETFs, opciones de ETFs, etc.- las mismas reglas de inversión aplican para estos fondos.
Por eso, me gustaría que repasemos algunos de los fundamentos de oro que todo trader necesita saber, de mano de uno de los inversores más importantes de la historia.
Las 17 reglas de Marty Zweig
Estas son las 17 reglas de inversión de Marty Zweig, un célebre inversor que tuvo una fortuna de USD 600 millones hasta su muerte en 2013.
En español, las reglas son:
1. La tendencia es tu amiga, no luches contra ella.
2. Deja que las ganancias crezcan, corta las pérdidas rápido.
3. Si compras por una razón, y si esa razón ya está descontada o no es válida, vende.
4. Si los valores no tienen sentido, no participes.
5. Lo barato se vuelve más barato, lo caro se vuelve más caro.
6. No luches contra la Reserva Federal.
7. Eventualmente, todo indicador deja de funcionar.
8. Adáptate al cambio.
9. No permitas que tu opinión sobre lo que debería suceder modifique tu estrategia.
10. No culpes al mercado por tus errores.
11. No inviertas todo el tiempo.
12. El mercado no es eficiente, pero es difícil de supera.r
13. Nunca tendrás todas las respuestas.
14. Si tus inversiones no te dejan dormir, reduzca tus posiciones o sal de la Bolsa.
15. No confíes demasiado (o nada) en los “expertos”.
16. No te concentres demasiado en los flujos de información a corto plazo.
17. Ten cuidado con el pensamiento de la “nueva era” (esta vez es diferente porque…)
Todas son importantes, pero algunas se destacan más que otras en estos tiempos inusuales que vivimos. Ahora más que nunca, es importante que nos adaptemos al cambio.
La regla número 9 también es crucial. No permitas que tu opinión sobre las noticias o los datos económicos influyan en tus inversiones. ¡Fundamentos, no emociones!
Buenas inversiones.
Germán Fuentes
Para El Inversor Diario
Economista con más de 25 años de experiencia en los mercados y autor del libro “El Inversor Exitoso”. Actualmente es editor de Proyecto 100%, donde ofrece recomendaciones de corto plazo en el mercado de las opciones financieras.