Esa es la percepción de los inversores indecisos y, así es como siguen sin aprovechar los rendimientos que el ecosistema cripto brinda. Los inversores inteligentes tienen presente que siempre es temprano para aprovechar la próxima subida.
“Quería invertir en cripto, pero ya subió demasiado”.
Son incontables la cantidad de veces que, como especialista e inversor cripto, me he topado con esta frase.
Me la han dicho amigos, familiares y hasta suscriptores de mis servicios a lo largo de todos estos años.
Puede que incluso tú también pienses que ya te has perdido la “última subida” de bitcoin y que ahora es muy tarde para adquirirlo y atesorarlo.
O quizás estés esperando hasta que baje lo suficiente para entrar en este mercado.
Déjame decirte que hay criptomonedas que están alcanzando ganancias astronómicas mientras tu esperas la ansiada “corrección” del precio.
Es por eso que hoy quiero hablar contigo acerca de por qué creo que es el momento de comprar criptomonedas.
Aprovecha la próxima subida
Si repasamos el historial de bitcoin, en cualquiera de sus episodios alcistas, la apreciación del público en general era la de: “ahora está caro para comprar”.
Siempre sucedió esto.
En 2010 cuando cotizaba USD 0,5, en 2018 cuando alcanzaba los USD 3.300 y también en 2020 cuando alcanzó su máximo histórico del año al superar los USD 28.000.
En cada momento, la percepción de estos inversores indecisos era que el precio estaba demasiado alto para comprar.
Sin embargo, si esas mismas personas analizan la cotización actual de bitcoin, fácilmente se darán cuenta que las ganancias que hubieran obtenido serían astronómicas.
Ahora bien, entiendo que pienses que con el diario del lunes es fácil medir el éxito de una inversión.
Déjame contarte lo que hay más allá.
Hace más de una década, Satoshi Nakamoto escribió el whitepaper de bitcoin. Te invito a leerlo si quieres conocerlo en profundidad.
Este documento fundacional de la moneda digital más importante del ecosistema cripto, estableció las bases de su funcionamiento, es decir, cuándo se emite, a qué ritmo y bajo qué mecanismo.
A la inversa de las monedas fiduciarias que los gobiernos emiten sin control y sin reparo de las consecuencias inflacionarias que acarrean, esta tecnología propone generar un proceso de emisión seguro, auditable y de características deflacionarias. Es decir, es una moneda que reduce su emisión a la vez que aumenta su demanda.
¿Cómo lo hace? A través del Halving.
Limitación de la emisión
El halving es el evento programado en el código de bitcoin que hace que cada cuatro años (cada cierta cantidad de trabajo en su blockchain que se acumula en cuatro años), las recompensas que se entregan a sus operadores se reduzcan a la mitad.
Es exactamente lo contrario a la inflación. En lugar de imprimir cada vez más dinero, se imprime cada vez menos.
El halving es un mecanismo creado para que no se repartan enseguida las criptomonedas como el bitcoin. Para lograrlo, se estableció este mecanismo de escalado que permite controlar la emisión.
Esto, históricamente, genera un mercado alcista de al menos dos años, un tercer año de corrección en los precios, un año siguiente de recuperación y, finalmente, al cuarto año, un nuevo halving.
El último halving sucedió el 8 de mayo de 2020. El halving anterior de bitcoin fue en 2016, y el previo a ese en 2012.
Esto significa que, si la historia se continúa repitiendo, todavía estaríamos frente a un mercado alcista para bitcoin.
Observa el siguiente gráfico, es la acción de precios histórica de bitcoin de la que tenemos registro (desde 2013). Encontrarás marcados los últimos tres halving y el período de influencia de cada uno:
Fuente: Coingecko (intervención propia).
Así se vio la acción en el primer período del que tenemos registros (2013-2016) Aquí faltan los datos de 2012, pero sabemos que entre 2011 y 2012 se realizaron transacciones de bitcoin con un valor de entre USD 2 y USD 13 por cada BTC:
Fuente: Coingecko (intervención propia).
El precio de bitcoin ascendió desde los USD 135 a principios de 2013 hasta los USD 1.100, en diciembre de 2013 (+ 714 %). Luego, durante 2014 el precio descendió hasta llegar a los USD 170 en enero de 2015 (+25% respecto a 2013). Allí se muestra con una línea punteada amarilla el nivel que sirvió de “piso” a los precios en el nuevo ciclo, para que puedas compararlo con el ciclo previo.
Una vez que se estableció un precio mínimo, comenzó un alza hacia el próximo halving, en 2016:
Fuente: Coingecko (intervención propia).
Los gráficos son parecidos, es por eso que podemos hablar de “ciclos”. Pero si observas los precios sobre el margen izquierdo, verás lo lejos que estaremos de los USD 135, USD 175 o incluso los USD 1.100 del ciclo anterior.
Durante los halving, se espera un período de 2 años de alza, 1 año de baja y otro último de recuperación hacia el próximo halving.
Se espera que el próximo sea en el año 2024 (aunque puede variar ya que se realiza cada cierta cantidad de transacciones realizadas sobre su blockchain). Así de precisa y anticipable es la propia regulación de bitcoin. Si haces clic aquí, puedes ver la cuenta regresiva (aproximada) hasta el próximo halving.
Este es el ciclo en el que estamos actualmente, que comenzó hace apenas un año:
Fuente: Coingecko (intervención propia).
Algunos dirán que ya vimos el máximo de este halving, otros dicen que no hemos visto nada todavía. Lo cierto es que los acontecimientos pasados no son un factor determinante en los hechos futuros, pero no dejan de crear expectativas en los mercados.
De hecho, se espera que bitcoin alcance las 6 cifras en un periodo no demasiado dilatado de tiempo.
Aquella frase que hace que no inviertas, “quería invertir en cripto, pero ya me perdí la subida de bitcoin”, siempre es aplicable. Y así es como sigues sin aprovechar los rendimientos de cripto…
Siempre es tarde para aprovechar la última subida de bitcoin, la que te llamó la atención. Pero siempre es temprano para aprovechar la próxima…
El mercado cripto todavía sigue siendo una tecnología muy joven y tiene mucho por crecer, solo es cuestión de empezar.
Buenas inversiones.
Iñaki es un inversor y educador argentino con una especialización en tecnologías emergentes de la Universidad de Oxford. Pasó más de una década asesorando empresas en cuanto a la innovación de sus productos. Y desde hace cuatro años, Iñaki se ha dedicado de lleno al mundo de la tecnología blockchain, la misma que respalda a la mayoría de las criptomonedas del mercado.
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