Este año la inflación fue la protagonista de todas las conversaciones, noticias y debates políticos. Si bien los Bancos Centrales intentan controlarla, en el mientras tanto sigues perdiendo dinero. Y la única forma de evitarlo es invertir, hoy te cuento por qué.
El año 2022 nos deja como enseñanza por qué es importante destinar parte de tu capital a invertir.
Los escenarios de inflación en el mundo generan desigualdad, pobreza e incertidumbre.
El ritmo al que los salarios se ajustan en contextos inflacionarios, generalmente es mucho menor al de la inflación. Por eso los grandes perjudicados son los asalariados. Como dice un viejo dicho, “los salarios suben por la escalera, la inflación por el ascensor”.
Pero quienes destinan parte de su salario o de su capital, por pequeño que sea, a invertir pueden cubrirse de la suba de precios.
Si poseen activos como acciones, estas tienden a subir más que la inflación en el mediano plazo.
La tasa de los instrumentos de renta fija también suele ser mayor que la inflación. Así mismo, tener propiedades como casas, apartamentos, bodegas u oficinas, también es un refugio de la inflación, porque las propiedades tienden a ajustar al alza sus precios cuando hay inflación.
Es decir, las personas con inversiones logran hacerle frente a la inflación sin perder el poder adquisitivo la mayoría de las veces.
Las inversiones también te permiten cubrirte de la devaluación, porque hay activos que replican el movimiento de las monedas locales, sin necesidad de hacer giros al exterior.
Pero la ganancia más importante que obtendrás al comenzar a invertir es el aprendizaje. Los inversores están en constante evolución, todos los días aprenden. Se involucran en la evolución de los datos macroeconómicos a nivel mundial, empiezan a entender las relaciones y correlaciones entre los diferentes indicadores económicos con sus inversiones. Todo eso hace crecer su educación financiera, e ir tomando mejores decisiones a medida que pasa el tiempo.
Con dedicación y paciencia, puedes comenzar a generar hoy el bienestar para tu vejez
¿Invertir es para todos?
Cuando las personas tienen el control en sus finanzas personales, logran minimizar las deudas, controlar los gastos y diversificar sus ingresos, lo cual es clave para comenzar a invertir.
Si no tienes tus finanzas sanas, las inversiones no son la solución a tus problemas de ingresos, de hecho, todo puede empeorar si tienes una pérdida no deseada.
Por eso el primer paso para comenzar a invertir es sanear tus finanzas.
Hace pocos días un inversor me llamó alterado porque su portafolio de acciones había disminuido su valor y necesitaba el dinero con urgencia, ya que era todo su capital el que tenía en esas inversiones.
Le expliqué que había cometido varios errores:
- Solo debes invertir excedentes de liquidez. Independientemente del perfil de riesgo, debes diversificar y no exponer más del porcentaje deseado en acciones.
- Y, además, la inversión en acciones debe ser de largo plazo, que te permitan soportar fluctuaciones negativas. La persona entendió y tuvo que asumir una pérdida no deseada por no medir su perfil de riesgo.
Con el alza de las tasas de interés, los créditos se han encarecido y si la persona tiene una inversión, es posible que esta le genere una renta mucho menor de lo que está pagando por el crédito. En ese caso, lo mejor es liquidar la inversión para no pagar intereses muy altos.
Si el inversor no logra tener deudas debajo del 30% de sus ingresos, no gastar menos del 50% de sus ingresos, y no tiene capacidad de ahorro, hay varias tareas por hacer.
La solución más común para los problemas de deudas y gastos no es centrarse en ello, sino en los ingresos. Con los ingresos mejoras esos dolores y además, puedes comenzar a ahorrar para formar tu capital.
Algunos jóvenes ven, en el trading y las inversiones, la alternativa para multiplicar su bajo capital, o para tener ingresos pasivos. La fórmula está completamente errada y lo más seguro es que una y otra vez se pierda el capital del inversor.
Lo primero que se debe hacer desde joven, antes de invertir, es ahorrar y tener capacidad para ellos. Ahorrar el 10%, 30%, o incluso el 50% o más del ingreso, es primordial para formar una base relevante en las inversiones.
De hecho, puedes ahorrar e invertir de manera simultánea a través de los fondos de inversión, que permiten tener planes de ahorro programado. Eso te permite aumentar tu capital de manera periódica, desde bajos montos.
Una vez que las personas ya han ahorrado mientras invierten, pueden comenzar a diversificar, a ir a activos de mayor riesgo como las criptomonedas o los fondos inmobiliarios, e incluso aprender a hacer trading, lo cual servirá para darle rentabilidad al dinero ganado con su trabajo, más no necesariamente para tener ingresos pasivos o para sustituir tu trabajo principal. Ojo con eso.
Debes ahorrar para invertir y aprovechar los recesos de navidad y de fin de año para aprender y ejercitar tu educación financiera.
Andrés Moreno Jaramillo
Para El Inversor Diario
Economista colombiano, trader, asesor financiero y analista económico y bursátil. Máster en Banca, Mercados Financieros y Gestión Patrimonial e la Universidad de Barcelona y de EAE Business School de Madrid. Tiene 20 años de experiencia en el sector financiero, 18 de ellos como trader y asesor en el mercado de valores.
Actualmente promueve el desarrollo y la inversión en mercado de capitales, dicta charlas, conferencias, cursos y seminarios sobre inversiones, finanzas personales y planeación financieras.