De mi padre rico aprendí seis principios que me llevaron a transitar el camino de las inversiones con éxito y disfrutar de libertad financiera hoy. Los comparto contigo.
Estimado lector:
Todos los asesores financieros dicen lo mismo: «Invierte a largo plazo en una cartera bien diversificada de acciones, bonos y fondos mutuos».
Creo que es el peor consejo financiero de todos.
No es la clase de activos lo que hace que una persona gane más o menos con sus inversiones. Por ejemplo, cuando una persona pregunta: «¿Los bienes raíces son una buena inversión?» Respondo: «No lo sé. ¿Eres un buen inversor?» O si preguntan: «¿Son las acciones una buena inversión?» de nuevo mi respuesta es la misma, «No lo sé. ¿Eres un buen inversor? »
Si eres como la mayoría de las personas y no estás interesado en tu educación financiera, haz lo que los “expertos” te indiquen, que es entregarles tu dinero.
Recuerda, el oro no es una buena inversión si tú eres un mal inversor. Nada es una buena inversión si eres un mal inversor.
Mi punto es que nunca es la inversión o la clase de activos el elemento más importante en la ecuación. El éxito o el fracaso, la libertad financiera o no, dependen únicamente de cuanta educación financiera tiene el inversor. Un inversor inteligente ganará mucho dinero en el mercado de valores. Un inversor que no esté bien preparado perderá mucho dinero.
Entonces, debes preguntarte, ¿eres un inversor educado o no?
Veamos cómo puedes descubrirlo.
Inversor inexperto vs Inversor preparado
Trágicamente, mucha gente no cree que aprender a invertir sea importante. Esta es la razón por la que la mayoría cree que invertir es arriesgado y entregan su dinero a «expertos», que por lo general no son inversores, sino vendedores que obtienen una remuneración independientemente de si su cliente gana o pierde dinero.
Los inversores poco preparados son fáciles de detectar. Por lo general, compran barato y venden caro o compran barato y rezan para poder vender caro a futuro.
Los derrumbes, como el de 2008 o el de marzo de 2020, devastan a los inversores que no están bien preparados.
Estos intentan dar con el timing del mercado con muy poca capacitación y experiencia, y creen que están diversificando sus carteras adquiriendo acciones de diferentes sectores.
Los inversores con educación financiera, por otro lado, explotan el mercado de valores para obtener beneficios. Con su sólida comprensión de cómo funciona el mercado y el conocimiento de que no pueden controlar hacia dónde se dirige este, por lo general utilizan métodos de inversión con una red de seguridad incorporada.
La estrategia más utilizada por ellos es valerse del mercado de valores junto con el mercado de opciones. Las acciones se convierten en su principal inversión, mientras que las opciones son como el seguro que compran para esa inversión. Es muy similar a los bienes raíces: compras la propiedad como inversión principal y luego compras un seguro para protegerla.
Es por eso, que los principales inversores del mercado de valores saben cómo replicar este mismo principio con las acciones y las opciones. No es difícil, pero se necesita un conocimiento básico de cómo funciona y cómo puedes implementarlo tú mismo.
Cuando se trata de activos en papel, las mayores diferencias entre los inversores con poca educación financiera y los inversores que sí están bien preparados están en cómo buscan generar ingresos y cómo gestionan el riesgo.
Demasiadas personas comienzan a invertir sin un plan o educación financiera. A continuación te presento seis reglas básicas para invertir, que mi padre rico nos enseñó a su hijo Mike y a mí.
Seis reglas básicas de inversión
(Independientemente del tipo de activo en el que inviertas)
#1 Siempre debes tener claro cuál es la clase de ingresos por la que trabajas.
Existen tres tipos de ingresos: ordinarios, de cartera y pasivos.
El ingreso ordinario generalmente se deriva de un trabajo o de alguna forma de trabajo y es el que conlleva la carga impositiva más alta de los tres tipos de ingresos, por lo que a partir de este es más difícil construir un patrimonio. Cuando aconsejas o animas a una persona a que «consiga un trabajo», esa persona comienza a pensar como un empleado y a trabajar para obtener ingresos ordinarios.
Los ingresos de cartera generalmente se derivan de activos en papel como acciones, bonos y fondos mutuos. Los ingresos de cartera son, por mucho, la forma más popular de ingresos provenientes de las inversiones, simplemente porque los activos en papel son más fáciles de administrar y mantener.
Los ingresos pasivos generalmente se obtienen de activos como bienes raíces, pero también pueden derivarse de regalías, de patentes o acuerdos de licencia e incluso del mercado de valores. Los ingresos pasivos son el cash flow que se genera a partir de una inversión. Es el dinero producido por un activo.
#2 Convierte tus ingresos ordinarios en ingresos de cartera o ingresos pasivos.
Mi padre rico solía decir que: «Convertir ingresos ordinarios en ingresos pasivos, en pocas palabras, es todo lo que se supone que debe hacer un inversor».
#3 Mantén seguros tus ingresos ordinarios adquiriendo activos que conviertan estos en ingresos pasivos o ingresos de cartera.
Un activo es algo que esperas que mantenga seguro tu dinero. Y, en general, estos activos están estrictamente sujetos a las regulaciones gubernamentales. Las acciones o una propiedad inmobiliaria son un activo que sirve de garantía para tu dinero.
#4 El inversor puede ser un activo o un pasivo.
A menudo se oye a la gente decir: «invertir es arriesgado». Pero es el inversor el que implica riesgo. He visto a muchos de los supuestos inversores perder dinero cuando todos los demás están ganando dinero. He vendido negocios a muchos de los llamados empresarios y vi cómo esos mismos negocios pronto quebraban.
He visto a personas tomar una propiedad inmobiliaria en perfecto estado, una propiedad inmobiliaria que está generando mucho dinero, y en unos pocos años, esa misma propiedad da pérdidas y se está cayendo a pedazos. Y luego escucho a la gente decir que invertir es arriesgado. Es el inversor quien representa el riesgo, no la inversión.
#5 Un verdadero inversor está preparado para lo que suceda. Uno que no intenta predecir qué y cuándo sucederán las cosas.
¿Alguna vez ha escuchado a alguien decir: “Podría haber comprado ese terreno por USD 500 la hectárea hace 20 años. Y míralo ahora. Alguien construyó un centro comercial justo al lado, y ahora ese mismo terreno cuesta USD 500.000 por hectárea”? Cuando escuchas a alguien decir esto, estás escuchando a un inversor que no estaba preparado.
La mayoría de las inversiones que pueden acercarte a tu libertad financiera están disponibles solo por un período limitado de tiempo: unos momentos en el mundo de la Bolsa o una ventana de oportunidad que está abierta durante años, como en el sector inmobiliario. Pero independientemente de cuánto tiempo esté abierta la ventana de oportunidad, si no estás preparado con educación y experiencia o dinero extra, no podrás aprovechar esa oportunidad.
#6 Si estás preparado, lo que significa que tienes educación y experiencia, y encuentras una buena inversión, el dinero te encontrará o tú lo encontrarás a él.
Las buenas oportunidades de inversión parecen sacar a relucir la codicia de la gente. Entonces, cuando una persona encuentra una buena oportunidad que promete una atractiva recompensa, atrae al dinero. Si se trata de una promesa poco atractiva, será muy difícil dar con el dinero necesario para poner la inversión en marcha.
Como solía decir mi padre rico: «La inversión es un tema del que puedes aprender los conceptos básicos y te servirán para el resto de tu vida». Lo que quiso decir es que suena complejo al principio y luego se vuelve simple. Cuanto más simple puedas hacer este tema o cuanto más principios aprendas, más probabilidades tendrás de alcanzar libertad financiera mientras reduces el riesgo. Pero el desafío para la mayoría de la gente es invertir el tiempo.
He descubierto que demasiadas personas quieren invertir como los más adinerados, sin tener primero una base financiera sólida. Y esto sucede porque tienen problemas financieros que necesitan solucionar con urgencia. Obviamente, no recomiendo invertir cuando estés desesperado.
¡Actúa con inteligencia!
Robert Kiyosaki
Para El Inversor Diario
Autor del best-seller Padre Rico, Padre Pobre, y una quincena de otros libros, es uno de los mayores gurús de las finanzas personales del mundo. Gracias a una alianza con Rich Dad Latino, en Inversor Global nos enorgullecemos de presentar Plan de Retiro Soñado, el único servicio donde Robert revela acciones puntuales para comprar y vender, y Súper Acciones Millonarias y Cash Flow semanal.