Cuando los precios crecen sin parar, tus ahorros en el banco pierden poder adquisitivo. Compras menos cosas con el mismo dinero. ¿Puedes hacer algo contra esta situación? Sí, y a continuación te cuento algunos ejemplos.
Estimado lector,
Para algunas personas la inflación es una mala noticia. No saben cómo utilizarla para enriquecerse y, por ende, la inflación los empobrece.
Por ejemplo, los empleados se ven perjudicados por la inflación porque solo pueden vender su tiempo y, por lo general, el tiempo no los protege contra la inflación. Los aumentos de sueldo, si es que llegan, por lo general se producen anual o bianualmente. Y, aun así, no les permite cubrir los gastos.
El año pasado fue muy particular con respecto a la inflación, de hecho. El festín de Thanksgiving Day (Día de Acción de Gracias) aquí en Estados Unidos tuvo a este fenómeno como protagonista. El pasado noviembre, la cena completa para 10 personas costó un 14% más que el año pasado.
Veamos las razones…
Las trabas en las cadenas de suministros y la escasez de mano de obra impactaron en la oferta de alimentos. Al mismo tiempo, la demanda de alimentos rebotó con fuerza en el último año, a raíz de las ayudas fiscales del Gobierno estadounidense y la política monetaria de la Reserva Federal.
Esta combinación de mayor demanda con menor oferta impulsó los precios de los alimentos y generó el círculo vicioso de inflación.
Las personas creen que son ajenas a este círculo vicioso, porque juegan con las viejas reglas del dinero. Lo que no se dan cuenta es que están perdiendo, de a poco, cada vez más.
Son estas personas las que se ven perjudicadas por la inflación, porque creen que es sabio y prudente ahorrar dinero depositándolo en el banco, sea en dólares o euros. Pero el banco es inteligente, no tonto. Y el banco sigue las nuevas reglas del dinero. Paga intereses sobre el dinero que no se ajustan a la inflación. Entonces, el dinero pierde poder adquisitivo a medida que el banco usa tu dinero para ganar más dinero.
No importa a dónde mires, las cosas se ven desalentadoras para el trabajador de clase media. Pero en lugar de centrarme en lo negativo, quiero enseñarte cómo prosperar en una economía con inflación.
Usa la inflación para enriquecerte
Utilizo una fórmula muy simple para enriquecerme con la inflación: apalancamiento y cobertura.
Pongo en práctica el juego del banco. Pido dinero prestado al banco a una tasa fija, compro un activo real estate que genere cash flow y cubro el pago de la deuda. Al utilizar menos de mi propio dinero, aumento el rendimiento de mi inversión.
En una economía inflacionaria, si el pago de la deuda es fijo, se vuelve un coste menor a medida que el dólar pierde poder adquisitivo y mis inversiones e ingresos crecen.
La razón por la que mis inversiones y mis ingresos crecen es porque compro activos que te protegen contra la inflación. Por ejemplo, en las economías inflacionarias, las rentas generalmente aumentan. Cuando compro una propiedad de inversión, el pago de la deuda permanece igual mientras mis alquileres aumentan debido a la inflación.
Esto crea más cash flow. Solo le debo al banco el pago acordado. Los crecientes costos del alquiler fluyen directamente a mi bolsillo.
Lo mismo ocurre con las empresas. A medida que aumenta el coste de los bienes para los consumidores, las empresas pueden ajustar sus precios y beneficiarse de la inflación.
Esto funciona porque los propietarios de negocios y los inversores no están vendiendo tiempo. Venden productos que los protegen contra la inflación. Ellos tienen el control. Los empleados no tienen el control de su producto (el tiempo) ni tienen el control de su dinero (el banco o un fondo mutuo sí lo tienen).
Otra cosa que hago para protegerme de la inflación es invertir en materias primas. Recientemente, en productos energéticos. Estos activos son una gran inversión cuando hay inflación.
Al final del día, no es más que lo que he estado predicando todo el tiempo: invertir para generar cash flow es la estrategia más segura y sólida que te servirá también en una economía inflacionaria. Es una forma segura de enriquecerse.
Sigue aprendiendo y aumentando tu IQ financiero. Entender el contexto en el que estás viviendo te facilitará crear estrategias para enriquecerte, aún en momentos de crisis.
¡Actúa de manera inteligente!
Robert Kiyosaki
Para El Inversor Diario
Autor del best-seller Padre Rico, Padre Pobre, y una quincena de otros libros, es uno de los mayores gurús de las finanzas personales del mundo. Gracias a una alianza con Rich Dad Latino, en Inversor Global nos enorgullecemos de presentar Plan de Retiro Soñado, el único servicio donde Robert revela acciones puntuales para comprar y vender, y Súper Acciones Millonarias y Cash Flow semanal.