Finalmente el pasado martes por la noche, Luis “Toto” Caputo, el flamante ministro de economía argentino, comunicó los primeros pasos del plan económico del nuevo mandato del presidente Milei. Brusca baja de la brecha y su impacto en las principales variables de nuestra economía.
Estábamos un poco ansiosos luego del discurso del presidente Javier Milei el domingo al mediodía en la asunción de mando. El diagnóstico había sido estremecedor: recibía una economía destruida que estaba al borde de la hiperinflación.
Pero faltaba conocer la solución. O por lo menos el principio de la solución. Y eso recién llegó el martes a las 19 h. El ministro Caputo publicó un mensaje grabado, breve, didáctico y conciso.
El ajuste que anunció tiene pocos antecedentes en la historia argentina.
Y es que, en palabras de Luis Caputo, el déficit fiscal es la madre de todos los problemas:
“Somos adictos al déficit. La génesis de nuestro problema y de nuestras crisis recurrentes es el déficit fiscal. Esa es la razón por la que las crisis se repiten. Siempre hemos atacado las consecuencias, pero no el problema”. |
Entonces, la primera parte del plan es matar el déficit fiscal e ir al superávit dentro del año 2024. Como podés ver en el siguiente cuadro, esta baja del déficit en tan poco tiempo tiene pocos antecedentes en la historia:
Solo tres veces en la historia hubo mejoras superiores al 3% del PBI del resultado fiscal: la primera fue durante la dictadura de 1977, la segunda con el Plan Austral de Alfonsín en el año 1985 y la tercera fue en la salida del Covid en el año 2021.
El ajuste que hizo Macri en el año 2018 y 2019 no llegó al 4% del PBI, y fue un plan que llevó adelante durante dos años. En cambio, en el gobierno de Milei se busca ajustar un 5,1% en solo un año.
Un objetivo mega ambicioso.
Entonces, la baja del déficit fiscal es la primera prioridad del plan Milei-Caputo. Es un elemento primario y fundamental del plan, pero mi impresión es que el plan económico tendrá varias etapas.
La primera fue lanzada el pasado día jueves y su principal prioridad es sincerar los precios relativos y comenzar a licuar la deuda del Banco Central.
¿Qué quiere decir “sincerar” los precios relativos?
Bueno, lo que pasó durante el mandato de Alberto Fernandez es que hubo una inflación promedio del 800%, pero muchos productos y servicios, como consecuencia de los controles de precios y otras trabas, subieron mucho menos que ese 800%.
Es imposible tener una economía eficiente con precios relativos distorsionados. Por eso, la primera prioridad es solucionar esta distorsión. En el siguiente cuadro podes ver el detalle de esta situación:
Como ves, el nivel general de precios se multiplicó por 8,8, pero los precios de la comunicación o de la vivienda o la electricidad, por ejemplo, solo subieron 5,6.
Entonces, por eso el gobierno elimina los subsidios a la electricidad y el transporte, entre otros ajustes. Porque necesitamos que esta situación se solucione.
Esta primera parte del plan es muy dolorosa. Porque es de esperar que la inflación se dispare durante el mes de diciembre. Se acaba de conocer que la inflación de noviembre estuvo en el 12,3%, pero la de diciembre como mínimo estará por arriba del 20%.
Es difícil que los salarios suban al mismo nivel durante diciembre y enero, por eso los primeros meses serán muy complicados para muchos argentinos. Una vez que se sinceren estos precios relativos, ya la presión será mucho menor.
Esta primera etapa tambien busca empezar a solucionar el problema de los diferentes tipos de cambio y especialmente el problema del dólar oficial tan retrasado. Por eso el incremento del tipo de cambio oficial de 350 a 800 pesos por dólar. Fijate en el cuadro que el precio del dólar oficial era uno de los más retrasados de todos los precios de la economía.
La buena noticia de esta medida es que el martes la brecha entre el tipo de cambio oficial y el paralelo era de 180%, pero ahora esa brecha se redujo por debajo del 30%. Esa es una buena noticia, ya que si se sostiene esta situación, la segunda etapa estará mucho más cerca de lo que creemos.
La etapa dos implica unificar todos los tipos de cambio y sacar el cepo cambiario. Esta es una medida fundamental para que la economía pueda volver a crecer. Con cepo es imposible que entren dólares a la Argentina. Y si no entran dólares, no hay inversión. Y si no hay inversión, no hay crecimiento.
Por lo tanto, si la brecha se mantiene baja, si el Banco Central puede ir licuando en pesos la deuda del Banco Central y si puede mandar reformas estructurales al congreso, el objetivo de salir del cepo está mucho más cerca.
Y la tercera etapa, en mi opinión, es la dolarización. Es cierto que ahora no se habla del tema, pero yo dudo mucho que Milei y Caputo descarten esa idea. No creo que sea rápido, tal vez hacia el segundo semestre del año que viene. Pero tengo la sensación que el régimen cambiario preferido por Milei no es la libre flotación.
Y Caputo, en varios documentos que escribió antes de asumir, tampoco es un convencido de la flotación. Por lo tanto, o una dolarización o una convertibilidad me parece que no son para descartar en una tercera etapa.
¿Cómo reaccionó el mercado ante estas medidas?
Bueno, el precio del dólar libre bajó levemente (2,8%) y el Banco Central pudo comprar casi 300 millones de dólares. Esto implica la mayor compra de dólares en cuatro meses por parte del Banco Central. Una muy buena noticia que deja a la brecha cambiaria por debajo del 30% por primera vez en muchos años.
Las acciones habían comenzado con fuertes bajas, pero terminaron mixtas, con algunas empresas subiendo fuerte y otras bajando fuerte. El S&P Merval bajó un 0,67% en pesos, pero subió un 2% en dólares. Los ADRs, que son las acciones argentinas que cotizan en Estados Unidos, crecieron un 1,6% en promedio.
Los bonos terminaron con alzas de alrededor del 4% en Estados Unidos, ayudados con declaraciones de la Reserva Federal de Estados Unidos que adelantó que va a bajar las tasas el año que viene.
En conclusión, los mercados reaccionaron en forma positiva a los anuncios, si bien estuvieron ayudados por el buen contexto internacional, no deja de ser una buena noticia.
¿Cómo podés invertir en este nuevo escenario?
Es muy probable que los plazos fijos no le ganen a la devaluación y a la inflación durante los próximos meses. Por ello, no es una mala idea elegir Obligaciones Negociables en dólares para los más conservadores y acciones y Cedears para los más agresivos.
Esas son justamente las inversiones que estamos eligiendo en la Membresía Argentina de Inversor Global. Pero, es clave seguir de cerca cómo evoluciona el mercado, para adaptar nuestras inversiones a las diferentes etapas del mercado.
Jueves a jueves vamos a seguir analizando la situación y lo vamos a compartir con vos.
¡Buen jueves de inversiones!