Tienen que ver con que en julio se registró una menor inflación en los Estados Unidos. Si sigue bajando en los próximos meses, los activos financieros arrancarán un nuevo mercado alcista. Puedes anticiparte a esto y empezar a invertir ahora.
Estimado lector,
¡Qué mejor que arrancar esta columna con tres buenas noticias! Estoy seguro de que después de leerlas tendrás más ganas de invertir que antes.
- 1) Por la baja de los combustibles, Estados Unidos no tuvo inflación en julio. En los últimos 12 meses los precios en la Primera Economía subieron 8,7%, una cifra alta pero cuatro décimas por debajo de la de hace un mes.2) La inflación núcleo, que no tiene en cuenta los cambios de los precios de la energía y los alimentos, fue dos décimas más baja a la esperada, se redujo del 0,7% al 0,3% en julio y se mantuvo en 5,9% en los últimos 12 meses.3) El índice de precios al productor (IPP) cayó 0,5% en julio y se contrajo del 11,3% al 9,8% en los últimos 12 meses. Por si no lo sabes, este índice mide las variaciones de los precios de los bienes intermedios. En cambio, la inflación se refiere a los movimientos de precios de una canasta de bienes finales que un estadounidense promedio consume. Todos los bienes finales están compuestos por bienes intermedios. Por lo tanto, un aumento de los precios de los bienes intermedios tiende a trasladarse a los precios de los bienes finales. En otras palabras, un aumento del IPP repercute en una mayor inflación. Como los precios al productor bajaron en julio, la inflación sería más tenue en los próximos meses.
¿Por qué te cuento estas tres buenas noticias?
Porque si la inflación baja, la Reserva Federal sería menos agresiva con su política monetaria. Más aún si tenemos en cuenta que la economía de los Estados Unidos está en recesión, después de dos trimestres en los que se achicó su PBI.
La Fed subiría menos la tasa de interés y absorbería menos dólares. Si hay más dólares circulando, ese dinero puede usarse para consumir y producir bienes y servicios, lo que repercutiría en mayores ingresos y ganancias para las compañías y precios más altos para sus acciones. Ese dinero también podría tener como destino la inversión en activos financieros, lo que empujaría hacia arriba los precios. Como viene sucediendo desde hace un mes, las acciones, los bonos, las materias primas y las criptos subirían.
Por eso, puedes ir preparando tus dólares ociosos para armar una cartera diversificada. Quizás, ahora mismo no sea el momento ideal para comprar acciones. En el último mes el índice S&P 500 subió 14%. El Nasdaq 100, que reúne a las 100 compañías tecnológicas más importantes, aumentó 16%. Y bitcoin trepó 28%. Es posible que después de estos muy buenos rendimientos venga una corrección. Y que sea mejor esperar y comprar acciones y criptos a precios más bajos que “perseguir” estos precios.
De acuerdo a los últimos registros, las empresas que componen el S&P 500 tienen un precio que equivale a 19,6 veces las ganancias que generan. Esta relación entre los precios de las acciones y las ganancias que generan las compañías está en exactamente el mismo nivel que el promedio de los últimos 33 años. En otras palabras, las acciones están a precios promedio. Ni caras ni baratas.
El Nasdaq 100 está todavía un 20% por debajo de los máximos de noviembre. Comprar el Invesco Trust, Series 1 (QQQ), es decir, el ETF que replica este índice, puede ser una buena alternativa. Si quieres ser selectivo, puedes centrarte en acciones de empresas consolidadas en sus respectivos mercados, con solidez financiera, buen management y gruesos márgenes. Microsoft [MSFT], Alphabet [GOOG] y Apple [AAPL] son ejemplos de estas compañías. Fuera de las tecnológicas, podemos nombrar aCoca-Cola [KO], Procter and Gamble [PG], Barrick Gold [GOLD] y JP Morgan [JPM]. De hecho, JPM está 30% por debajo de su máximo de enero.
Dentro de las criptos puedes centrarte en las dos más consolidadas. Pese a la reciente suba, Bitcoin [BTC] todavía está 65% por debajo de su máximo de noviembre. Y Ethereum [ETH] tiene un precio 61% menor al récord histórico.
Para diversificar el riesgo tienes los bonos del Tesoro estadounidense. Estos títulos fueron muy castigados durante la primera parte del año con la inflación marcando récords y la Reserva Federal endureciendo su política monetaria. Sus precios bajaron al mismo tiempo que sus rendimientos subieron. A principios de año, un Treasury a 10 años rendía 1,5% anual, muy por debajo de la inflación esperada del 2,7% por año para el mismo plazo. La caída de sus precios hizo que sus rendimientos volvieran a ubicarse sobre la inflación esperada. Los bonos a 20 y 30 años ya rinden 20 puntos básicos más que la inflación que se espera para esos períodos.
Después de estas buenas noticias, el viento parece estar soplando a favor de los activos de riesgo. Armando una cartera diversificada en acciones, criptos y bonos probablemente puedas esperar un rendimiento en torno al 12% anual para en los próximos cinco años.
Así, cerramos la semana.
Nos vemos la próxima.
Bruno Perinelli
Para El Inversor Diario
Bruno Perinelli es licenciado en Economía (UBA) y tiene un posgrado de especialización en mercado de capitales. Con 12 años de experiencia operando acciones, monedas, commodities, bonos y derivados, es el jefe de Trading de Inversor Global y ha estado a cargo de tres servicios de análisis de trading. Actualmente participa como analista de mercados de Cash Flow Semanal y Súper Acciones Millonarias, y publica regularmente consejos de inversión en Mercado en 5 minutos y El inversor diario.