En contextos inflacionarios como el actual, mantener la calidad de vida con un salario promedio es casi imposible. Pero si das un vuelco en la gestión de tus ingresos, podrías convertirte en un inversor y alcanzar la libertad financiera.
Progresar económicamente se ha vuelto una tarea sumamente ardua en las últimas décadas.
Ya no basta con tener un título universitario y saber más de dos idiomas para conseguir un trabajo que nos provea un nivel de vida acorde a nuestros gustos y necesidades.
Para colmo, en el mundo resurgió una enfermedad económica que había sido erradicada hace tres décadas: la inflación.
En complicidad con los gobiernos, los bancos centrales derrumbaron las tasas de interés y emitieron más de 11 billones de dólares durante 2020 y 2021, para sacar a las economías de la crisis de la pandemia. Fue tanto el dinero que imprimieron que el consumo y la inversión se recuperaron rápidamente. Y la crisis duró solamente un par de trimestres.
Pero después de la crisis, la producción de bienes y servicios no aumentó tanto como la cantidad de dinero en circulación. Esta fue la principal causa del rebrote de la inflación en el mundo.
Y se sumaron las trabas en las cadenas de suministros y la Guerra entre Rusia y Ucrania, que sólo agudizaron la suba de precios.
Fuente: FMI a través de Statista
No solo hay inflación en el mundo. El PBI de Estados Unidos se contrajo en los últimos dos trimestres, la economía china está estancada, y se proyecta una recesión en la Unión Europea y el Reino Unido. El 75% de la producción mundial no crece.
La inflación y el estancamiento económico hacen muy difícil que tus ingresos crezcan por arriba de los precios. Progresar económicamente es todavía más difícil en este contexto.
Por eso es fundamental que que nos eduquemos financieramente para hacer rendir mejor nuestros ingresos.
Haz que tu dinero rinda
Entre las decisiones que puedes tomar para utilizar tus ingresos y hacer que rindan más están:
- Consumir inteligentemente: aprovechando descuentos y promociones de bienes y servicios que demandamos habitualmente.
- Invertir otra parte de nuestros ingresos en activos de valor que nos permitan hacer crecer nuestro capital y/o nos provean otras fuentes de ingresos.
En la columna de hoy me voy a ocupar exclusivamente del punto 2.
Según Robert Kiyosaki, hay cuatro fuentes de donde podemos obtener nuestros ingresos, que varían según nuestra condición laboral.
Como empleados trabajamos una cierta cantidad de horas por las que cobramos un sueldo regularmente. Si somos cuentapropistas o autónomos, recibimos honorarios por los servicios que proveemos. Como dueños de un negocio percibimos los frutos de nuestra actividad después del pago de las obligaciones. Y, si somos inversores, cobramos dividendos o intereses, o aumentamos nuestro capital con la apreciación de nuestros activos.
El 97% de la población mundial es empleado o autónomo. Estas personas eligen esta condición porque se aseguran cobrar por el tiempo que trabajan. Tienen un ingreso lineal y solamente el 3% de la riqueza de todo el mundo.
En cambio, el 3% de la población mundial invierte o es dueño de su negocio. A diferencia de los anteriores, estos últimos obtienen un ingreso “residual”. Es decir, cobran el dinero que queda después de pagar las obligaciones de cada proyecto: las ganancias de los dueños, y los dividendos, intereses y el aumento de los activos de los inversores.
Si buscas “seguridad” en tu carrera laboral como asalariado o autónomo, lo más seguro es que llegues con lo justo a fin de mes.
Que sigas lo que Robert llama “la carrera de la rata”:
Si no tienes dinero, el camino más rápido para conseguirlo y poder comprar los bienes y servicios que te gustan, es endeudándote. Una vez que los consumes, vuelves a no tener dinero y tienes deudas que pagar. Por lo que, tienes que conseguir un trabajo que te permita tener dinero para pagar tus deudas y tus gastos.
De nuevo, vuelves a no tener dinero y tienes que seguir trabajando para seguir pagando las deudas y los gastos.
No avanzas, como la rata corriendo en la rueda giratoria.
Tener ingresos “seguros” implica asumir un costo muy alto.
Para escapar de “la carrera de la rata” lo primero que tienes que hacer es cambiar el orden en el que usas tu dinero.
En general, primero las personas suelen pagar sus cuentas y luego ahorran e invierten lo que les queda de su ingreso.
Las personas ricas hacen al revés. Primero invierten una porción de sus ingresos y luego usan el resto para sus gastos corrientes.
¿Por qué priorizan sus inversiones sobre su consumo?
Porque las inversiones les proveerán ingresos por fuera de su actividad principal que les permitirán progresar económicamente y alejarse de “la carrera de la rata”.
Imagina qué pasaría si hicieras lo mismo.
Apenas cobras a principio de cada mes, destinas una parte de tu ingreso a pagar un curso que te permite mejorar tus habilidades en tu trabajo cotidiano. Otra parte de tu ingreso lo usas para comprar acciones de empresas grandes, que crecen de manera estable, y están consolidadas en sus mercados, como Coca-Cola [KO] y Procter and Gamble [PG]. Estas empresas pagan dividendos regularmente y sus acciones se aprecian, en promedio, un 7% por año. El resto de tu ingreso lo consumes inteligentemente aprovechando los descuentos y promociones.
Haciendo este giro en el uso de tu ingreso, después de un tiempo, estas inversiones te proveerían de cuatro nuevas fuentes de ingreso:
- Un mayor sueldo por mejorar tus habilidades en tu empleo gracias al curso
- Los dividendos que cobras por ser dueño e inversor de empresas grandes
- El aumento de tu capital invertido por la suba de las acciones de las empresas grandes
- Y la reinversión de los dividendos. Si compras más acciones con lo que recibes de dividendos, te ganas el derecho de cobrar más dividendos.
Cuatro fuentes de ingreso para dejar “la carrera de la rata” y progresar económicamente.
Hasta la próxima,
Bruno Perinelli
Para El Inversor Diario
Bruno Perinelli es licenciado en Economía (UBA) y tiene un posgrado de especialización en mercado de capitales. Con 12 años de experiencia operando acciones, monedas, commodities, bonos y derivados, es el jefe de Trading de Inversor Global y ha estado a cargo de tres servicios de análisis de trading. Actualmente participa como analista de mercados de Cash Flow Semanal y Súper Acciones Millonarias, y publica regularmente consejos de inversión en Mercado en 5 minutos y El inversor diario.