El Carry Trade es una estrategia que se utiliza en los mercados de compra y venta de divisas por la que un inversor vende cierta moneda con una tasa de interés relativamente baja y compra otra diferente con una tasa de interés más alta. La idea es poder ganar una diferencia con el resultado de la especulación.
Es decir, es una forma de arbitraje financiero que está diseñado para explotar el resultado de diferencias entre las tasas de interés de los bancos centrales.
Se trata de una estrategia supeditada a una inversión que supone comprar una divisa para simultáneamente vender otra. De esta forma, la apuesta radica a que una de las divisas se va a apreciar (la de inversión) respecto a la de financiación.
Es una de las técnicas que los grandes inversores han llevado practicando en el mercado Forex (mercado de divisas) desde sus inicios.
Carry Trade Wikipedia
Wikipedia denomina a esta forma de invertir como bicicleta financiera o bicicleta a secas. “Es una inversión realizada en moneda local para, luego de un determinado plazo, obtener un beneficio en moneda extranjera”, explican.
La mecánica de la bicicleta se produce “cuando un inversor vende una moneda con una tasa de interés relativamente baja y compra otra diferente con una tasa de interés más alta, también consiste en la diferencia entre el carry negativo de un activo que se ha pedido prestado a bajo costo y el carry positivo de un activo en el que se ha invertido”.
El comprar “supone una moneda para simultáneamente vender otra, o lo que es lo mismo, financiarse en una divisa e invertir ese dinero en otra”. “El inversor de esta forma especula con que una de las divisas se va a apreciar (divisa de inversión) respecto a la otra (divisa de financiación)”, se lee en Wikipedia desde donde advierten no confundir el carry trade con el arbitraje. En el segundo “se gana siempre una utilidad”. Con el carry trade no, “solo si nada cambia”.
Ejemplos de Carry Trade en Argentina
Nuestro país ha dado numerosos ejemplos de bicicleta financiera, puntualmente potenciados por las características del modelo económico de la actual gestión. Los bonos y las letras son un buen ejemplo para entender la mecánica del proceso.
Supongamos el siguiente caso. Primero, un dólar cuyo valor a 20 pesos. Una tasa de interés sin cambios en donde el inversor vende una suma de dólares por la moneda cuya tasa es más baja, en este caso el peso argentino. Con ese capital hace una inversión para mantener activos los pesos – el año pasado se recomendaba las Leliq, que son los bonos que están rindiendo en la tasa.
Durante un período se levanta la inversión realizada con esos pesos y se recupera eso más el monto invertido, generando una ganancia producto de las tasas de interés sobre la inversión. Es decir, con la totalidad de los montos utilizados para adquirir dólares con lo que no sólo se gana el diferencial de la divisa extranjera, sino además el porcentaje de tasas que nos dejó el movimiento en moneda local y bonos.
Objetivos del Carry Trade
Estando en la mente de un inversor, el objetivo que persigue la estrategia de la bicicleta financiera es la obtener como beneficio la diferencia entre ambos tipos de interés, que puede variar en función de la cantidad de apalancamiento usado.
Como el beneficio viene del diferencial de tipos de interés, se puede obtener beneficio aunque el precio de las divisas no varíe ni un solo pip (la cantidad de pips o puntos mide la diferencia entre el precio de entrada y el precio de salida de una operación).
Las fases del Carry Trade
El Carry Trade implica tres fases. En principio se “sale” de una moneda fuerte, como es la moneda de Estados Unidos, y se apuesta por una moneda más débil, como es considerado el peso.
Luego, en esta segunda etapa, se invierten los pesos que resultaron de esa venta y se los coloca en un negocio con buena rentabilidad, por ejemplo, un plazo fijo con altas tasas de interés o las Leliq mencionadas arriba.
Como tercer paso, se remarca el de recolectar las ganancias y con esos pesos, que son más que antes, volver a comprar la moneda de origen, los dólares.
Riesgo o beneficio.
Por lo tanto, el carry trade tiene un retorno total proveniente de dos fuentes de riesgo o beneficio: el riesgo propio del instrumento en pesos que pueden ser bonos, acciones o, como se ejemplifica habitualmente, las Leliq, y el riesgo cambiario.
Mientras que el primero se refiere a la expectativa de lograr ganancias de capital y devengamiento de intereses en moneda local, el segundo riesgo alude a variaciones en el tipo de cambio durante el período de maduración de la inversión.
A fin de cuentas, cada uno de los pilares impacta de forma diferente en el carry trade. Por un lado, a mayor beneficio en pesos, mayor es la ganancia en dólares. Por el otro, a mayor devaluación, menor es el retorno en la moneda dura, en nuestro caso el dólar.