Coronavirus sin vacuna, inversores sin refugio

Sin escapatoria
Más volátil que nunca
Más leña al fuego
Zona de buitres
El dilema de Alberto

0:30| La baja no da tregua

Literalmente, el mercado se cayó a pedazos.

Hacía más de 11 años que no se veía a Wall Street caer más de un 25% en tan poco tiempo. El momento más esperado de los “predicadores del desastre” finalmente llegó y no parece querer detenerse.

Se vive un escenario de pánico extremo. No hay indicadores ni señales que permitan saber cuándo frenará la sangría. Y hay algo peor aún. Los activos de cobertura como los metales preciosos también se destruyen.

¿Pero tan grave es la situación?

Es que la misma política está generando pánico. El mismísimo Donald Trump había subestimado al coronavirus hace unos días atrás. Pero ante el agravamiento del problema, debió cambiar el discurso rápidamente.

En la última conferencia de prensa anunció la suspensión por 30 días de los vuelos desde Europa hacia los Estados Unidos para contener al coronavirus. Asimismo, impulsó un paquete de estímulos impositivos para evitar que la economía entre en recesión. Recordemos que una economía pujante es la “carta número 1” del republicano para ganar las elecciones.

Pero los mercados siguieron haciendo oídos sordos.

Ni siquiera reaccionó ante el anuncio de la FED. La Reserva Federal desplegará toda su artillería para contener la debacle del mercado inyectando liquidez por más de USD 1,5 millones mediante la compra de bonos en los próximos días.

Si bien esto debería tranquilizar, el derrape continúa.

Entonces…. ¿cómo podemos sobrevivir a este escenario?

Históricamente los inversores que tuvieron el coraje para comprar activos cuando todos venden hicieron grandes fortunas. Pero no es sencillo identificar el mejor momento para hacerlo. Lo que hoy está muy barato, mañana puede estarlo aún más.

Es crucial mantener liquidez en la cuenta y esperar que el mercado depure. Cuando los vendedores se corran a un lado, será el momento de máxima oportunidad.

1:20| El índice del miedo no se detiene

Cuando el mercado baja de esta manera, los inversores suelen medir el nivel de “pánico” mediante un indicador muy peculiar. Se lo conoce como “El índice del Miedo” y se lo puede encontrar en cualquier portal de finanzas con el ticker VIX.

Este indicador suele funcionar como el termómetro del pesimismo y el miedo en los inversores. Lo hace en base al promedio ponderado del precio al que se negocia un grupo de opciones del S&P 500, y usualmente tiene una correlación inversa con el mismo.

Para que tengamos una dimensión del miedo en el mercado, este indicador se ha incrementado a máximos de 12 años. Desde la crisis inmobiliaria de los años 2008-2009 no se ve este nivel de volatilidad.

Es el mejor de los mundos para que los traders desplieguen toda su capacidad. Pero todo lo contrario para un inversor conservador.

2:50| Lagarde, más pesimista que nadie

Sigamos hablando de lo que pasa en el mundo.

Europa está viviendo una situación particular por la fuerte propagación del virus en ciertas regiones, especialmente en el norte de Italia. Y la decisión de muchos países de blindar sus fronteras es un condimento más para que la eurozona se paralice completamente.

Hoy se dieron a conocer los datos de la industria del mes de enero y fueron bastante buenos. Quizás sea el último gran dato que veamos este año. La producción industrial se expandió un 2,3% mensual, aunque la industria acumula una caída interanual del -1,9%.

Las perspectivas hacia adelante no son las mejores.

En la introducción de esta entrega te hablé del pánico que se genera desde la política. Christine Lagarde, la titular del Banco Central Europeo, no fue la excepción.

La ex- Directora del FMI advirtió que Europa podría volver a vivir una crisis similar a la de 2008 si no se toman medidas de fondo. Si bien el organismo decidió mantener los tipos de interés en el nivel actual, decidió impulsar un paquete de medidas para inyectar liquidez e impulsar el crédito en la región.

De todos modos, las bolsas europeas se desplomaron entre el 12% y el 16% en la jornada de hoy.

3:20| Preparando la billetera

Argentina no está exenta de la debacle internacional. De hecho, debido a que tiene una de las economías más vulnerables del planeta, los impactos son aún mayores. Hoy el riesgo país superó ampliamente los 3.000 puntos debido a la dura caída de los bonos soberanos en dólares, que ya cotizan con una paridad del 35%.

“La paridad es el cociente entre la cotización del bono y su correspondiente valor técnico, expresado en porcentaje”.

Se cree que con paridades en orden al 30% en bonos de alto riesgo, los fondos buitre comienzan a comprar, ya que creen que la probabilidad de que el país emisor caiga en default es muy alta. Eso les permite tener mucha influencia en una renegociación, negarse a cualquier acuerdo y litigar contra el país en los tribunales de Nueva York.

Si los buitres comienzan a comprar bonos argentinos, la renegociación de la deuda será mucho más difícil. Ante la necesidad de llegar a un acuerdo rápidamente, el gobierno argentino ya presentó una oferta a los bonistas.

Veremos cómo resulta.

4:30| Con la “maquinita” en marcha

Es inevitable que este shock mundial no afecte aún más la economía argentina. El nivel de actividad se contraerá mucho más a medida que se tomen mayores medidas de precaución para evitar que el virus se propague en el país.

Si hay menos actividad, el estado recauda menos. Y justamente este un momento donde el gobierno busca incrementar los fondos para garantizar el buen funcionamiento del sistema de salud. Eso complica aún más la capacidad del país para afrontar los vencimientos de deuda en moneda local. Con lo cual no habrá otras opciones que seguir emitiendo billetes.

¿Y qué pasa cuando se emite descontroladamente?

Más inflación.

Hoy el INDEC informó que en el mes de febrero el índice de precios tuvo un incremento del 2% mensual. La inflación interanual disminuyó al 50,3%. Si bien bajó la inercia inflacionaria, será difícil sostener el ritmo en los próximos meses.

Esto fue todo por hoy,