Los bancos centrales, en teoría los principales adversarios del ecosistema de criptomonedas, están creando criptos fiduciarias, las CBDC: ‘Central Bank Digital Currency’. Hoy como estas monedas están relacionadas con el fin del dinero como lo conocemos.
Los primeros días de mayo ya mostraban lo sorpresivo y vertiginosos que sería este mes.
El hierro, cobre, madera y maíz lograban sus máximos precios en ocho años. Por su parte, las semillas de canola y la soja también alcanzaban niveles récord o cerca de ellos…
Todo parece está subiendo, incluidos los mercados de valores.
El índice principal de las 500 principales empresas de Estados Unidos alcanzó un nuevo máximo histórico y las criptomonedas continúan, pesos a algunos tropiezos, en su ruta alcista.
¡Incluso el oro parece estar rebotando de su reciente caída!
A partir de estas cifras, parece que la economía está en auge.
Pero los números dicen otra cosa…
Una cuenta que no cierra
Los analistas, probablemente viendo los números en auge de los que hablamos anteriormente, tenían grandes expectativas. Tanto es así, que la estimación de consenso fue de alrededor de un millón de nuevos puestos de trabajo y una tasa de desempleo del 5,8%.
Pero el número real fue de solo 266.000 nuevos puestos de trabajo y una tasa de desempleo del 6,1% en territorio estadounidense.
Por supuesto, los mercados se regocijaron con estas “malas noticias”, ya que los inversores empezaron a valorar la posibilidad de que las bajas tasas de interés se extendieran en el tiempo.
Pero pensemos en todo esto por un segundo…
Hay un auge de “todo”, especialmente en las materias primas. Esto, a primeras luces, indicaría una economía funcionando a toda máquina y, sin embargo, la cifra de empleo dice exactamente lo contrario.
Todos vimos lo que sucedió durante la pandemia cuando los mercados de valores se dispararon mientras casi se detuvieron las ruedas del comercio.
Fue sin duda un punto de inflexión ya que fuimos testigos de la desconexión completa y definitiva entre los mercados y la economía.
Dicho de otra forma, la atadura entre el dinero y la economía ahora está rota.
Esta es una conclusión a la que también llegó mi colega, el analista financiero Greg Canavan que ha venido reflexionando sobre estos temas y de qué forma se conectan con la Gran Crisis Financiera que comenzó en 2008.
Ambos hemos tratado de darle una lógica a la gran diferencia que existe entre lo que está pasando en los mercados y lo que sucede en la vida real.
La única respuesta que se nos ocurrió es que el dinero se está muriendo.
Hay ciertos indicadores que dan cuenta de ello. Uno de ellos es que ya nadie quiere acumular billetes, por lo que están poniendo su dinero ahorrado en tierras, acciones, criptomonedas, materias primas… en cualquier lugar menos en una cuenta bancaria que gane insignificantes intereses.
Por supuesto, no queremos decir que el dinero en sí mismo desaparezca. O que los dólares en tu bolsillo perderán valor de la noche a la mañana.
Lo que estamos diciendo es que el sistema monetario que usaremos durante la próxima década será diferente en un nivel fundamental y cada día hay más pruebas de que nos estamos alejando de un sistema de petrodólares construido sobre una deuda insostenible.
Este es probablemente el punto importante para tener en cuenta en cada inversión que se realice. Y, sin embargo, pocos hablan de ello.
Por qué GovCoin es una amenaza para todos nosotros
Si aún no te convence la idea de que el dinero está cambiando, solo debes observar cómo los bancos centrales de todo el mundo están experimentando con una idea llamada Monedas digitales del banco central (CBDC por sus siglas en inglés, puedes encontrar un artículo de Germán Malnero en la que habla de ellas en detalle, haciendo clic aquí).
Es una idea peligrosa porque los bancos centrales, no contentos con arruinar el sistema monetario existente, ahora apuestan por aumentar su poder sobre el dinero como si esa fuera la respuesta al problema que ellos generaron.
Sí, la arrogancia es impresionante. Tal y como lo es el artículo de primera plana de The Economist publicado el pasado 8 de mayo donde se señalaba que las monedas digitales “importantes” eran el Fedcoin y el e-euro.
El artículo no se detiene ahí y destaca que las CBDC, no bitcoin o Ethereum, son las “más revolucionarias” de todas las ideas de moneda digital que existen.
Pero, y siguiendo la línea de argumentación del artículo, esto significaría entonces ¿más poder para el estado?
No, gracias…
Sabemos que el futuro del dinero va más allá de determinar dónde invertir, aunque, por supuesto, ese es un aspecto clave. Por eso decimos que es probablemente el cambio más importante desde el fin del patrón oro.
Las personas que piensan libremente necesitan conocer los hechos. Antes de que nos impongan un nuevo sistema monetario que afianza el poder de los mismos burócratas sin rostro que están causando muchos de los problemas que estamos viendo en este momento.
Buenas inversiones.
Ryan Dinse
Para Cripto en tu Idioma
Originario de Escocia y radicado en Australia, Ryan Dinse es un economista y trader de clase mundial especializado en criptomonedas. Antes de dedicarse a las tecnologías financieras emergentes, trabajó en la banca de inversión, donde manejó USD 500 millones en activos de sus clientes. Sin embargo, abandonó su puesto para dedicarse a su verdadera pasión: las oportunidades de alto potencial. En 2013, compró sus primeros bitcoins, años antes del boom de las criptos. Hizo fortunas con la explosión bitcoin en 2017 y hoy se dedica a compartir su conocimiento con inversores de todo el mundo. Es editor de Extreme Crypto Trader en Inversor Global.