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Invertir en la Bolsa es un tema desafiante para muchas personas, están aquellos que consideran que debes ser un experto en el tema y manejar bien los números, y hay otro grupo que asegura que manejar estos instrumentos es solo cuestión de estudio y enfoque.
Si sos de ese puñado de personas que está indeciso por comenzar en este universo financiero, solo te decimos que en el mercado de capitales hay un espacio para todos porque hay un perfil adecuado para cada inversor.
Cuando se piensa en invertir de forma segura, quizás lo primero que viene a tu mente, entre los miles de opciones en el mercado, es el plazo fijo tradicional. Sin embargo, hay una herramienta de inversión que no necesita tantos conocimientos y, de acuerdo con el mecanismo, funciona igual.
Hay una opción que resulta ser eficiente, cómoda, rápida, muy intuitiva para abordar y, además, se adapta bien a un perfil de riesgo conservador. Hablamos de la caución bursátil que en muchos otros lados se conoce como el plazo fijo de la Bolsa.
Cuando reina la incertidumbre, este tipo de alternativas son buscadas porque no es necesario tener el dinero retenido durante 30 días, o más, como ocurre con el plazo fijo que siempre has conocido. En este artículo te daremos todos los detalles.
¿Qué es una caución bursátil?
Como ya te contamos, es un tipo de inversión muy parecido al plazo fijo que siempre hemos conocido; es decir, un préstamo a corto plazo que regularmente es de 1 a 120 días hábiles, pero en esta oportunidad que se encarga de tomar el dinero que deseas invertir no es una entidad bancaria, sino otro inversor quien dejará títulos en garantía para respaldar la operación.
Como sucede en un plazo fijo tradicional quien presta el dinero (colocador de la caución) recibe una rentabilidad en concepto de interés calculado como Tasa Nominal Anual (TNA). Esta operación podrá realizarse tanto en pesos argentinos como en dólares.
Una de las características de este tipo de instrumentos es que, además de servir como modo de inversión, también se puede usar como la caución para pedir prestados fondos. Para esto, es fundamental y necesario presentar títulos de garantía que cuentan un aforo correspondiente. Y cuando hablamos de aforo, se refiere al porcentaje del valor de mercado de un título que será validado como garantía.
Esto quiere decir que si contás con mil acciones de alguna entidad bancaria de argentina, y cada una de ellas cotizan a $110 por acción y aforan el 80%, la cartera tendrá un valor de mercado de $110.000 (bajo el cálculo 1.000 acciones multiplicado por $110), los cuales podrás usar esos títulos y tomar una caución de hasta $88.000. Recordá que, para consultar los aforos actualizados de todos los instrumentos, podés acceder al portal web de Bolsas y Mercados Argentinos (ByMa).
De acuerdo con los especialistas, la caución bursátil es una opción para los inversores que tienen algún excedente de dinero en sus cuentas por diversos motivos, porque transfirieron pesos o gestionaron una venta de algún activo y no tienen pensado usarlo de forma inmediata. Esta es una opción que ofrece colocar el dinero a distintos plazos.
Otro rasgo importante es que los títulos que el tomador de la caución deja en garantía como respaldo para la operación está consolidado, además, por el Mercado de Valores. Esto lo convierte en un instrumento ideal para el conservador.
En ese sentido, esta alternativa ocupa una posición importante porque le otorga mayor seguridad por encima de otras inversiones con manejos de liquidez. Muchos inversores no vieron afectadas sus finanzas aun en los años 2001 y el 2019, épocas de gran impacto por el nivel confiscatorio.
Asimismo, los plazos con mayor liquidez son de 1,7 y 30 días tanto para las cauciones en pesos argentinos como en dólares, también se podrán hacer cauciones a cualquier plazo que se desee. Es importante aclarar que las cauciones no pueden finalizar en días no hábiles; es decir, si querés colocar una caución a 7 días y dentro de una semana hay un feriado, la mejor alternativa es colocar a 6 días y luego renovar a 1 días. Es una opción muy flexible.
¿Qué es el aforo?
Es la cantidad que se descuenta por anticipado y la cual se va a un fondo en calidad de garantía en una operación. Todas las cauciones pueden llevarse a cabo sobre títulos públicos (bonos y letras) locales y extranjeros y sobre títulos privados y también sobre cuotas de fondos comunes de inversión.
¿Cuáles activos sirven como garantía?
Todas las cauciones pueden realizarse mediante títulos públicos; es decir, bonos. Además, sobre títulos privados que son las acciones. Durante la vigencia del contrato, las especies quedan caucionadas.
Es necesario que recordemos los conceptos de estos activos:
Bonos
Son todas aquellas promesas de pago que son convertidas a títulos públicos, para ser más claros son préstamos donde existe un emisor y un receptor. Considerando que el emisor puede ser el Estado o una empresa. Los bonos son considerados instrumentos de renta fija porque el emisor se compromete a devolver el capital que recibió a través de una fecha determinada, al pago periódico de intereses y al cumplimiento de toda la obligación especificada en el bono.
Los bonos son inversiones de renta fija por lo que son convenientes utilizarlos porque al momento de gestionar y hacer la inversión correspondiente ya sabes cuál será la tasa de interés que devengará. Aunque el valor del bono puede variar, en la finalización del plazo recibirás el capital más los intereses acordados.
Acciones
Es un título de propiedad que te convierte en dueño de un porcentaje de una empresa, pero esa empresa tiene que ser Sociedad Anónima en Argentina porque este tipo de empresas divide su capital en acciones y, de esa forma, cuando un inversionista tiene acciones de una empresa se convierte en socio o accionista.
Las inversiones en acciones se les conocen como renta variable, y cuentan con un riesgo más alto en comparación a las rentas fijas. A diferencia de los bonos, acá no conocés la tasa de interés al momento de realizar una inversión. Sin embargo, a mayor riesgo, mayor será el rendimiento que se alcance por lo que se suele recomendar para objetivos de mediano y largo plazo.
Entonces, los bonos y las acciones son instrumentos de inversión que permiten al inversor incrementar sus ahorros, aunque tiene riesgos muy diferentes uno del otro, es importante que al momento de decidir la vía de inversión del dinero se tome en cuenta y claro cuál será el plazo de la inversión y el riesgo que se desea correr, de acuerdo con los objetivos que se plantearon dentro de la estrategia.
Beneficios de operar con las cauciones bursátiles
La ventaja con mayor peso de este instrumento financiero con respecto al plazo fijo tradicional es que ofrece la posibilidad de colocar el dinero desde un día en adelante y no tiene una tasa de interés prefijada porque esta va variando en función de la oferta y la demanda de fondos para los distintos plazos.
Según los especialistas, un plazo fijo de la bolsa en Argentina a solo 30 días está rindiendo aproximadamente entre 34 y 35% de tasa nominal anual. Entre otras de las ventajas de esta alternativa están:
- Brinda mayor liquidez. El valor de una caución bursátil se rige por un lado en su tasa, pero también en la alta liquidez que garantiza.
- Plazo a elección. En este caso, el inversionista es quien decide el plazo que requiere para su operación: 1,5,20, 30 días. La opción más utilizada y recomendada es a un mínimo de siete días.
- Se pueden colocar cauciones en pesos argentinos o también tenés la opción de contratar cauciones bursátiles en dólares.
- La Tasa Nominal Anual es mayor porque una vez que se contraten por períodos cortos, el rendimiento de esta se aumenta por el interés compuesto que se genera.
- Inversión garantizada. La persona que solicita fondos debe ofrecer garantías sobre la caución bursátil.
¿Cómo funciona la caución bursátil?
Lo que se debe tener en cuenta desde el primer momento es que, para hacer funcionar este instrumento, es necesario dos partes que intervienen de forma activa: el colocador y el tomador.
El colocador es quien aporta el dinero y, al finalizar el período previamente establecido, recibe el capital más los intereses. Por otro lado, el tomador es todo aquel que recibe los fondos y se encarga de colocar títulos de acciones y bonos en el mercado de capitales como garantía de pago.
Es por esto, que la caución está ubicada como una de las opciones más seguras en palabras de inversiones financieras, mucho más que el plazo fijo tradicional.
Cuando la caución bursátil llega a su vencimiento, el colocador recibe los intereses y el capital pactado. El tomador, regresa el préstamo más la tasa de caución bursátil, recupera sus activos.
¿Cómo se invierte en una caución bursátil?
Los primero que se necesita es tener una cuenta comitente, también llamado cuenta de inversión con dinero en efectivo en ella, sea en pesos argentinos o en dólares, en una sociedad de bolsa regulada por la Comisión Nacional de Valores, es un proceso gratuito, rápido y seguro no llevará mucho tiempo para el registro.
Después, por medio de la plataforma del broker con el que se maneja el inversor se podrá encontrar cómo operar con cauciones y colocar fondos en una. Se podrá llevar a cabo por medio de la plataforma web, enviando órdenes por mail o por vía telefónica.
Paso a paso, cómo empezar a invertir desde cero
Paso 1
Elegí un Agente de liquidación y compensación (ALYC), o también conocido como broker o agencia financiera. Entre las más reconocidas están: InvertirOnline y Portfolio Personal.
Paso 2
Abrí una cuenta de inversión. Este paso es rápido y sencillo, se lleva a cabo a través del portal web de la agencia con la que se haya elegido operar. Lo más probable es que la plataforma solicite una selfie del rostro, una foto de frente y otra del dorso del Documento Nacional de Identidad (DNI) así como otros datos personales. Este trámite es online, sin costo de apertura y mantenimiento.
Paso 3
Ingresá dinero a la cuenta de inversión, esto se puede realizar por medio de una transferencia de pesos argentinos o dólares desde cualquier cuenta bancaria. Recordá que debes ser el titular de la cuenta para realizar esta operación. Cuando el dinero esté acreditado en la cuenta, es momento de comenzar a operar.
Diferencias entre cauciones y pases bursátiles
Estos dos instrumentos son colocaciones de fondos, que reúnen ciertas características similares. Si un inversor cuenta con una cartera de valores y necesita efectivo a corto plazo puede entregar títulos de garantía de forma temporal mediante estas dos alternativas y recibir el capital que sea necesario. De igual forma, si el inversor cuenta con un dinero excedente puede también invertir en estas operaciones y recibir a cambio un rendimiento.
Sin embargo, entre ellas existen diferencias. El pase bursátil es un único contrato que contempla dos operaciones simultáneas. Acá el inversor vende valores negociables a un precio de contado o al plazo que le convenga y pacta simultáneamente la operación inversa de compra para un mismo comitente y en un vencimiento posterior.
En estas operaciones quien vende los títulos de contado deja de ser el propietario, así que al momento de fijar el precio futuro se debe tener en cuenta si los títulos pagarán dividendos u otros conceptos.
Las ventajas de usar el pase bursátil son:
- Se pueden aplicar fondos líquidos a una operación de corto plazo que permite obtener una tasa de interés a cambio.
- El inversor que cuente en su cartera con acciones o bonos y requiera fondos líquidos ocasionales, puede realizar una operación de base vendiendo los títulos en el presente y venderlas en una operación simultánea.
- Cuenta con una operación de realización garantizada; es decir, el mismo día que se realiza un pase se produce la venta y recompra a futuro, esto implica que ambas operaciones quedarán definidas en el mismo acto asegurando así la operación de futuro.
Por otro lado, la caución bursátil, como ya te hemos comentado, es una operación parecida. Sin embargo, la diferencia radica que al precio de venta contado de los valores objeto de la caución se le aplica un aforo (garantía) determinado por el Mercado de Valores.
El aforo, que también explicamos anteriormente, es un porcentaje que fija el límite de fondos que puede obtener el tomador a cambio de los títulos de garantía que entregó. Entonces, el inversionista que cuenta con fondos líquidos puede prestarlos a cambio de valores y al vencimiento del plazo convenido obtener el dinero prestado más un rendimiento.
Las cauciones no implican cambios de propiedad de los títulos sino inmovilización por un tiempo determinado. Recordemos algunas de sus ventajas:
- Permite obtener una tasa de interés a cambio cuando se apliquen los fondos líquidos a la operación de corto plazo.
- El inversor que cuente con una cartera de acciones o bonos y necesite fondos líquidos ocasionales, puede acceder a una caución que inmoviliza los títulos en el presente, con un aforo de garantía y abonando el monto total en el futuro.
- Las operaciones están garantizadas y cuentan con el respaldo del Mercado de Valores de Buenos Aires (Merval).
Caución bursátil: rentabilidad vs. riesgos
El beneficio que genera para el inversor surge de la diferencia entre el monto que va a invertir al inicio de la operación y lo que recibirá al final del plazo acordado; es decir, la tasa de interés establecida. El tomador permite, a cambio de una tasa determinada, la cobertura de necesidades ocasionales de liquidez poniendo como garantía activos financieros en su cartera.
En cuanto a los riesgos, con la caución bursátil los riesgos son muy acotados, ya que, si el tomador no paga, se liquidan los activos en garantía y se abona el efectivo. Lo que sí se debe tener en cuenta es la liquidez que en algunos plazos se cuestiona en caso de que tenga que desarmar la operación.
Conclusión
Si hablamos de inversiones seguras, los plazos fijos de la Bolsa representan ese vehículo financiero adecuado porque es seguro, rápido y rentable. Es un préstamo de dinero entre diversos participantes del mercado de capitales. Quizás pudiera parecer riesgoso prestarle dinero a un desconocido, pero el papel del tomador es actuar como contraparte central, por lo que no hay un trato directo entre ambas partes.
Para muchos especialistas en la materia, este instrumento es una buena alternativa para sacarle rendimiento extra a los activos inmovilizados ya que, al tener la opción de colocarlos en garantía, se puede sacar algún beneficio. Quien esté dispuesto a colocar su dinero podrá gozar de una tasa de interés similar, y en algunos casos superior, al plazo fijo tradicional, pero sin congelar el dinero por 30 días ya que la caución permite operar desde 1 hasta 360 días.