Las deudas son una de las primeras preocupaciones de todas las personas. En el actual contexto, es probable que tus deudas se vuelvan cada vez más costosas. Con mi columna de hoy aprenderás a controlar y organizar tu estado financiero de forma rápida y segura.
Querido lector:
Hoy vamos a hablar de los pasos que deberías seguir para ganarle la batalla a las deudas.
Muchas personas creen que tomar deudas siempre es algo negativo, pero es una gestión financiera más dentro de tu manejo del capital.
Es por eso que debes hacerlo con inteligencia. Si eres de esas personas, entonces es hora de que cambies la mentalidad
¿Cuán difícil es cambiar tu forma de pensar acerca de la deuda?
Para que te hagas una idea, según una encuesta de CreditCards.com, un 85% de los estadounidenses dicen que las deudas con la tarjeta de crédito es su tema de discusión tabú número uno.
La vasta mayoría de las personas preferirían hablar abiertamente de temas como: su vida amorosa, su sueldo, sus problemas de salud, su peso, e incluso el fallecimiento de seres queridos antes que de la deuda que tienen con la tarjeta de crédito.
Según un estudio nacional que compara el monto de deuda que los consumidores dicen tener versus el monto de deuda real que las entidades de crédito informan, los estadounidenses subestimaron la deuda en aproximadamente un 40%. Y no tengo dudas de que los argentinos piensan lo mismo.
La conclusión: las personas no solo odian hablar de la deuda, ni siquiera les gusta reparar en ella. El resultado: no tenemos idea del problema en el que estamos metidos.
Eso tiene que cambiar. Si alguna vez esperamos alcanzar la independencia financiera, vamos a tener que empezar a cambiar nuestra forma de pensar de una inacción no intencional a una acción intencional.
Tu primera acción intencional
Cuando me puse a investigar acerca de la deuda y del crédito, trabajé con un gran asesor llamado Greg O’Connell.
Un día, le pregunté cuál era la medida más importante que las personas pueden tomar para aumentar las probabilidades de tener éxito en la eliminación de deuda.
“Piensa en el mundo corporativo”, me dijo. “Cuando hay dinero involucrado, ¿ves a las personas tomar decisiones sobre la base de sus emociones? Aun así, nosotros, los consumidores, lo hacemos constantemente”.
“En los negocios y en las finanzas personales, tienes que tomar decisiones dejando de lado las emociones en lo que hace al gasto de dinero”, dijo Greg. “No hay ninguna empresa que tome decisiones sobre la base de las emociones. Si conoces alguna, te mostraré que está camino al fracaso”.
Luego, me hizo hacer un ejercicio…
Quiero que te imagines que eres el nuevo director financiero de una corporación. Ya no estás administrando más tus finanzas personales. Estás a cargo de las finanzas de tu empresa.
Ese fue un pensamiento poderoso: ser el director financiero de mi propia empresa.
Al pensar en mí como gerente, sabía que tenía que empezar por determinar el estado actual de mi empresa. Aquí llegamos al primer paso de la serie.
Realizar una evaluación personal
Si tu objetivo final es estar libre de deudas, lo primero que tienes que hacer es determinar tu situación actual. Si no haces eso, vas a terminar manejando en círculos. Te va a costar el triple llegar al destino y vas a terminar perdiéndote la fiesta.
El paso a seguir: Descubre tu ingreso neto
Vamos a empezar enfocándonos en los ingresos y los gastos, cuánto estás gastando cada mes en relación con cuánto ganas. Esto es como descubrir si tu empresa está generando ganancias o está operando a pérdida.
Todo dólar positivo que encuentres después de contrastar tus ingresos contra tus egresos estará destinado al pago de tus deudas o para gastos futuros. Mientras más generes, más rápido podrás eliminar tus deudas del todo.
Si te encuentras severamente endeudado, seguramente estás gastando más de lo que ganas regularmente.
Esto indicaría que tu empresa opera a pérdida.
Cuando hagas el registro de tus ingresos Tal vez es peor de lo que pensabas o exactamente lo que esperabas.
Puede que estés sorprendido, abrumado o frustrado (o, esperemos, aliviado). Pero recuerda: el director financiero no opera sobre la base de emociones.
En vez de eso, esboza una estrategia calculada para encarrilar la empresa.
Esto significa utilizar diferentes tácticas:
- Disminuir gastos.
- Buscar dinero para pagar las deudas.
- Vender activos, si fuere necesario.
En el ínterin, lleva a cabo un registro detallado de todo con el objetivo de hacer un seguimiento del progreso de la empresa en el tiempo, estrategias que vamos a cubrir en ensayos futuros.
¿Cómo te está yendo?
Ahora que tienes el número final, puedes usarlo para evaluar el estado financiero actual de tu “empresa”.
¿Cómo hacer eso? Existen un par de formas, pero déjame presentarte una de las más sencillas.
La regla 50/30/20
Una manera es compararlo con la regla general para destinar tu dinero: la regla 50/30/20.
Según LearnVest, esta regla, presentada por un abogado y profesor de quiebras de Harvard, sostiene que el 50% debería reservarse para “elementos esenciales”.
Elementos esenciales son cosas que necesitas para tu supervivencia básica: vivienda, calefacción, comida, asistencia médica básica, pago del préstamo (esto se puede discutir, pero hay que pagarlos).
Después de eso, el 30% de tu dinero debería destinarse a lo que LearnVest denomina “opciones de estilo de vida” , cosas como salidas por la noche y múltiples plataformas de streaming que no terminas de mirar.
Luego, al menos un 20% debería destinarse a las “prioridades financieras”, lo que incluye el pago de deudas, contribuciones destinadas a la jubilación y, por supuesto, el ahorro.
Divide tus gastos dentro de estas tres categorías y compáralos.
Puede que te des cuenta de que tu proporción está desequilibrada.
Vamos a empezar a hacer cambios para intentar encontrar un balance. Simplemente, quiero hacerte entender que tus hábitos de gasto actuales pueden no reflejar pautas “saludables” todavía.
También ten presente lo siguiente: siempre puedes volver a esta proporción para registrar tu progreso mientras avanzamos.
¿Qué pasa después?
Asegúrate de registrar todos los números en un lugar que mires regularmente. Mientras avanzas en el programa, recalcula tus números para controlar tu progreso.
Tener un registro no solo te motiva, sino que estudios muestran que las personas que anotan y registran sus objetivos tienen mayor probabilidad de alcanzarlos con éxito.
A propósito, no deberías olvidarte del ejercicio de hoy durante el próximo mes. Ahora mismo, agenda dos momentos del mes que viene para sentarte y actualizar tu tabla.
Hazlo en este momento.
Recuerda: son siempre las acciones las que cuentan, la intención no te llevará lejos .
Saludos y hasta la próxima.
Mark Morgan Ford
Para El inversor Diario
Mark tiene una vocación indiscutible para enseñar a otros cómo generar su propia riqueza.
Tiene perfectamente claro cómo construir una fortuna de un millón de dólares desde cero: cada lección, cada idea, cada estrategia, técnica y aplicación. Qué hacer primero. Dónde aplicar esfuerzos para obtener el máximo beneficio. Qué no intentar nunca.
Más de 30 años de experiencia en negocios e inversiones, avalan sus conocimientos y le convierten en el mentor ideal para quienes quieren emprender y comenzar a construir su propia riqueza.
Mark logró una gran riqueza respetando su propio «sentido común» y siguiendo una serie de simples principios rectores a los que se ha ceñido durante toda su vida.
Es coleccionista de arte y libros raros. Su amplio repertorio en este sentido alcanza los tres millones de dólares.
Hoy en día, es líder del equipo que da vida al Club para Generar Riqueza en el que comparte sus secretos para alcanzar la independencia financiera.